Un blog de opinión e informaciones enfocado en temas relacionados con los derechos de la mujer. Soy una demócrata radical en el desarrollo de las naciones, con la equidad e igualdad social, económica y política de los ciudadanos/as dominicanos/as y del mundo.
También encontrarás algunas producciones literarias buscando un sentido de interioridad y una visión universal.
Jorge Eliécer Gaitán: la violencia , la intolerancia política y sus consecuencias en el Colombia de hoy
En este post coloco algo de información sobre el 'bogotazo' y la muerte del líder liberal abogado Jorge Eliécer Gaitán.
Una causa de lo que está pasando en Colombia: la intolerancia del otro para manejar las diferencias. Las sociedades pagan caro esa actitud. En la política eso es mortal, y se refleja en los fraudes, en la dictadura, en los golpes de Estado.
Los antagonismos de clases sociales necesitan de líderes y de estructuras que no inhiban la participación, el debate, los acuerdos, los compromisos, las leyes, las consultas, los programas de gobierno, la opinión pública, la educación, los foros, los blogs, las redes virtuales...
Todos estos son mecanismos de cohesión, de tolerancia, de poder expresar las diferencias; la democracia con la circulación de las ideas desarrolla la sensibilidad de poder escuchar, tomar en cuenta a los demás, la apertura hacia los otros, cono
¿Quiénes mandaron a matar a Gaitán el 9 de abril del 1948? ¿Por qué matar?
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ASESINADO JORGE ELIÉCER GAITÁN
Abril 9 de 1948
La muerte del caudillo
Las esperanzas de una sociedad más justa terminaron con la muerte del líder que encarnaba las esperanzas de los más pobres.
Sobre el 9 de abril de 1948 se pueden escribir muchas cosas, pero sin duda las tres balas que segaron la vida de Jorge Eliécer Gaitán Ayala se convirtieron en el detonante que partió en dos la historia del siglo XX en Colombia
Pero, ¿qué significaba Gaitán en la sociedad colombiana para que ella reaccionara de la manera como lo hizo ante su asesinato? Nacido en Manta (Cundinamarca), Gaitán llegó a ser uno de los mejores penalistas y políticos de la época. Estudió en la facultad de derecho de la Universidad Nacional en 1925 y se graduó magna cum laude, en derecho penal en la Universidad de Roma. La astucia y habilidad política hicieron de Gaitán un verdadero caudillo que despertó admiración y se entronizó en el corazón de su pueblo. Fue el capitán del "país nacional" que se enfrentó valerosamente al "país político", señalando la politiquería, la corrupción, el fraude y el engaño como las plagas que carcomen a la Nación, oprimen al pueblo y no permiten progresar. Esta labor no sólo la realizaba en el Congreso de la República sino en la oficina de abogados que él tenía, lugar donde sucedería el magnicidio.
Al ataque
En la mañana de ese día, Juan Roa Sierra, un joven esquizofrénico que vivía en el barrio Ricaurte, salió de su casa sin bañarse ni afeitarse. Vestía un raído traje carmelita de paño rayado, zapatos amarillos rotos y un sucio sombrero de fieltro. A las 10 de la mañana se dirigió al centro de la ciudad, al famoso café Gato Negro, popular sitio de reunión de intelectuales, periodistas, poetas y bohemios, localizado a pocos metros del edificio Agustín Nieto, donde Gaitán tenía su oficina de abogado.
A las 9 de la mañana el caudillo llegó a su oficina. Hacia el medio día Roa Sierra se dirigió a la oficina del penalista. La secretaria, Cecilia de González, atendió la inesperada visita del extraño que solicitaba entrevistarse de inmediato con el jefe liberal. Al no ser atendida su petición Roa Sierra abandonó la oficina con muestras de altanería y desagrado, y se ubicó sobre la carrera séptima, cerca de la puerta del edificio.
Entre las 12 y la una de la tarde arribaron a la oficina Jorge Padilla, Alejandro Vallejo, Pedro Eliseo Cruz y Plinio Mendoza Neira, amigos personales de Gaitán. Hacia la una de la tarde Mendoza Neira invitó a los asistentes a almorzar al Hotel Continental: "Acepto, Plinio, pero te advierto que yo cuesto caro", contestó Gaitán. Al salir del ascensor Plinio Mendoza tomó del brazo a Gaitán y detrás siguieron Cruz, Padilla y Vallejo. En el momento que llegaron a la puerta del edificio, siendo la 1:05 de la tarde, Roa Sierra apuntó con el revólver a Gaitán, quien de inmediato se desprendió de Plinio y trató de regresar al edificio. En ese instante el homicida disparó tres veces sobre él. Apremiados por la inesperada circunstancia sus acompañantes buscaron un vehículo para llevarlo a la Clínica Central. Allí falleció cuando su amigo y médico Pedro Eliseo Cruz se disponía a practicarle una transfusión de sangre.
'El bogotazo'
Estupefactos, los transeúntes, loteros y lustrabotas del sector empezaron a gritar: "¡Mataron al doctor Gaitán!, ¡mataron al doctor Gaitán!, ¡Cojan al asesino!". Un cabo de la Policía capturó a Roa Sierra, lo golpeó y lo desarmó e ingresó con él a la droguería Granada cerrando la reja para proteger la vida del homicida. Cuando se le inquirió por las causas él respondió: "No puedo.son cosas poderosas que no puedo decir". Luego la turba enfurecida que se había formado en minutos sacudió la reja y la abrió. La muchedumbre ingresó y un lustrabotas le pegó con su caja de embolar en la cabeza. Roa Sierra cayó al piso. Lo sacaron de la droguería y sobre el andén lo masacraron.
La noticia de la muerte del jefe del liberalismo se difundió a todo el país. En Bogotá la turba que se había congregado frente a la Clínica Central bajó a la carrera séptima y engrosó la marcha macabra que se dirigía a Palacio. Al llegar a la carrera séptima con calle octava, desnudaron el cadáver de Roa y amarraron los pantalones a un palo para ser agitados como bandera revolucionaria mientras gritaban "¡Viva Colombia! ¡Abajo los godos!". En las otras ciudades del país la revuelta estalló en focos dispersos, parciales, en actitudes grupales o aisladas, pero reflejaban la situación de indignación del pueblo liberal.
Al llegar a Palacio los manifestantes arrojaron el cuerpo desnudo de Roa Sierra contra la puerta principal. De inmediato salieron del Batallón Guardia Presidencial 80 soldados al mando del teniente Silvio Carvajal y procedieron a dispersar a los manifestantes, quienes abandonaron el lugar replegándose hacia la Plaza de Bolívar.
Algunos grupos de revoltosos se congregaron en las esquinas bordes de la Plaza de Bolívar. Comenzaron los incendios en el sector; primero ardió el Palacio de San Carlos, luego la Nunciatura Apostólica, los conventos de las Dominicanas y de Santa Inés, la Procuraduría General de la Nación, el Instituto de la Salle, el Ministerio de Educación, la Gobernación de Cundinamarca, el Palacio de Justicia y los tranvías. A la par de los incendios se iniciaron los saqueos a los almacenes, joyerías y platerías.
A las 3 de la tarde salieron de la Escuela de Motorización (hoy Grupo de Caballería Mecanizado Rincón Quiñones), tres tanques de guerra y seis carros blindados al mando del capitán Mario Serpa rumbo a la Plaza de Bolívar. El capitán Serpa, para evitar el uso de las ametralladoras con que estaban provistas sus unidades blindadas, abrió la escotilla y trató de persuadir a los manifestantes para que se retiraran. En ese instante tres tiros hirieron mortalmente al capitán. De inmediato los tanques dispararon sobre la multitud.
Aunque el sector del Palacio Presidencial fue controlado por el Ejército, la autoridad en la capital desapareció. Los policías se sublevaron, apoyaron la revuelta, distribuyeron fusiles entre espontáneos francotiradores y, en la Quinta Estación, trataron de organizar con algunos líderes gaitanistas una junta revolucionaria para darle alguna dirección al movimiento insurgente y tumbar el gobierno de Ospina Pérez.
Hacia las 6 de la tarde llegaron a Palacio Darío Echandía, Carlos Lleras, Plinio Mendoza y Luis Cano. El presidente los recibió con sorpresa, pues él no los había invitado. Los dirigentes sugirieron que la solución era la renuncia del primer mandatario. Ospina les manifestó que eso provocaría una guerra civil, pues en el resto del país la situación estaba controlada, los gobernadores y alcaldes le respaldaban y las Fuerzas Militares adelantaban los operativos necesarios para restablecer el orden.
A medida que iban pasando los días la situación se fue normalizando: el 10 de abril Ospina nombró ministro de Gobierno al dirigente liberal Darío Echandía, el 11 de abril Laureano Gómez viajó rumbo a España, el 13 de abril se reanudaron la sesiones de la Conferencia Panamericana; en fin, la ciudad volvió a su tranquilidad y la violencia continuó, como fue habitual desde la década de los años, en las provincias y zonas rurales del país.
Qué cambió
Si después del asesinato de Gaitan Bogotá volvió a la normalidad, no hubo ningún cambio estructural en el gobierno ni en sus instituciones y la violencia partidista no nació a partir de este acontecimiento, ¿por qué el homicidio de Gaitán cambió la historia de nuestro país?
Porque su muerte recrudeció la exclusión y persecución política del contrario e hizo patente la crisis de legitimidad del Estado. La violencia que se generó en el campo provocó un desplazamiento masivo de la gente hacia las urbes, y fue de esta manera como las ciudades empezaron a tener asentamientos humanos subnormales conocidos como tugurios.
Los pobres de entonces engrosaron la clase media y los emigrantes y desplazados del campo formaron el estrato bajo e indigente que vive entre la penuria y el hambre. Esa nueva clase social, miserable y desposeída hasta de la esperanza, que sólo se tuvo en cuenta como un fenómeno migratorio, años más tarde sería otro factor de desestabilización que afectaría, al final del siglo XX, a toda la Nación colombiana.
*Historiador y escritor
América Latina fortalece su liderazgo regional: Análisis de José Natanson, argentino
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El país, Argentina|Domingo, 30 de Diciembre de 2007
REHENES, AUTONOMIA LATINOAMERICANA, REACCION DE EE.UU.
Vivir con lo nuestro
Más allá de sus bordes ideológicos, el caso de los rehenes de las FARC tiene una característica central: fue manejado entre vecinos, con Washington observando con creciente incomodidad cómo suceden cosas sin su influencia.
Por José Natanson
La operación para rescatar a los rehenes colombianos confirma una de las grandes noticias políticas de los últimos años: la creciente participación de los gobiernos de América latina en las crisis que suceden en América latina. Una afirmación que a primera vista puede parecer una obviedad, pero que marca un quiebre en la historia de la región y que genera fricciones con Estados Unidos, que mira con más sospecha que apoyo el creciente protagonismo de su tradicional patio trasero.
Hacerse cargo
No es la primera vez que los países latinoamericanos intentan proyectar su influencia estabilizadora en la región. El antecedente más lejano es el Grupo Contadora, formado en 1983 por Colombia, México, Panamá y Venezuela, y al que después de sumaron Argentina, Brasil, Perú y Uruguay, para ayudar a los países centroamericanos que luchaban por dejar atrás las dictaduras y las guerras internas. Corrían los tiempos de la primavera democrática y aquellas naciones que habían superado la larga noche autoritaria buscaban acelerar la transición en el resto de América latina.
Doce años después, en 1995, Perú y Ecuador retomaron su vieja disputa limítrofe, que se remonta al momento mismo de la independencia y la división de la Gran Colombia, con una guerra absurda. Argentina, que había sido uno de los garantes de la primera paz, provocó un escándalo internacional cuando se descubrió que había vendido armas a Ecuador. El conflicto se saldó poco después gracias a una gestión clave de Brasil, que impulsó un armisticio firmado en Brasilia y titulado, con más agradecimiento que originalidad, “Declaración de Paz de Itamaraty”.
Pero son antecedentes aislados y lejanos. En realidad, los momentos de mayor protagonismo latinoamericano pueden encontrarse en los años recientes. En octubre de 2003, con La Paz aislada por los indígenas que reclamaban la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada, Kirchner y Lula, que se encontraban juntos en Buenos Aires para anunciar una serie de acuerdos económicos, decidieron enviar una misión conjunta para buscar una salida a la crisis. El representante brasileño fue el mismo que hoy transpira junto a Kirchner en la selva colombiana, Marco Aurelio Garcia, y el resultado fue la renuncia de Goñi y su reemplazo por Carlos Mesa.
Un tiempo antes había habido una reacción, también latinoamericana y también crucial, que a menudo es pasada por alto. En abril de 2002, un grupo de militares venezolanos ejecutó un golpe de Estado contra Hugo Chávez y cedió el poder al empresario Pedro Carmona. El hombre duró solo un día en el gobierno (los venezolanos lo apodaron “Pedro El Breve”) y Chávez fue repuesto en su cargo por los mismos militares que lo habían desplazado con el curioso argumento de que no había presentado una renuncia firmada. El fracaso del golpe tiene muchas explicaciones, desde la decisión de Carmona, que supuestamente venía a salvar la democracia, de disolver por decreto la Asamblea Legislativa, hasta el apoyo masivo de las masas chavistas. Pero sin duda una de las causas más importantes fue la reacción de los países latinoamericanos: Eduardo Duhalde fue el primer presidente que dijo “golpe”, la palabra que la CNN demoró dos días en pronunciar, posición a la que luego se fueron sumando los gobiernos de Brasil, Chile y México. Al año siguiente, con Venezuela aún desgarrada por la polarización, un grupo de países liderado por Brasil formó el Grupo de Amigos de Venezuela, que impulsó la convocatoria del Referéndum Revocatorio de 2004, en el que Chávez arrasó con el 60 por ciento de los votos y logró definir el empate político que paralizaba al país.
La misión de paz en Haití de junio de 2004, finalmente, no es una iniciativa estrictamente latinoamericana, sino una decisión de las Naciones Unidas integrada por tropas de diferentes países, entre ellos algunos tan exóticos como Filipinas y Nepal. Pero nuevamente aquí el rol de la región fue definitorio: el primer jefe civil de la misión fue Juan Gabriel Valdés, un experimentado político chileno, y el comandante militar el general brasileño Augusto Heleno Ribeiro Pereira. La mayor parte de los Cascos Azules destinados a Haití son latinoamericanos: 1197 brasileños, 572 uruguayos, 548 argentinos, 448 chilenos y 205 peruanos.
En tándem
El líder de todas estas movidas fue Brasil, un país que pasó casi toda su vida mirándose a sí mismo, tal vez como resultado de su particularidad lingüística y cultural y de sus especificidades históricas: es, de hecho, el único país latinoamericano que contó con un rey en su territorio. Pero en 1985, luego de la dictadura, Brasil decidió romper con su tradicional ensimismamiento y comenzó a mirar con otros ojos, más amigables, a sus vecinos, un poco como resultado de un cálculo muy lógico –el desarrollo nunca sería posible en una región convulsionada– y otro poco como parte de su decisión de fortalecer su liderazgo sudamericano.
Pero esto nunca hubiera sido posible sin una buena relación con Argentina, su tradicional competidor en Sudamérica. Los columnistas televisivos que suelen quejarse por la falta de políticas de Estado deberían repasar la historia reciente de la relación bilateral: tras la recuperación de la democracia, los gobiernos de Raúl Alfonsín y José Sarney dieron el primer paso en la construcción de una alianza duradera con la firma de un convenio de inspecciones nucleares mutuas. Lo que podría haber terminado en una escalada al estilo India-Pakistán se convirtió en una política de amistad –los especialistas la llaman “construcción de confianza”– que se fue profundizando con el paso de los años. Aunque duela reconocerlo, el Protocolo de Asunción, primer gran hito del Mercosur, fue firmado por Carlos Menem y Fernando Collor de Melo en 1991, en el inicio de un proceso de integración que en los ’90 asumió un tono comercial, orientado al intercambio de bienes, pero que nunca fue abandonado del todo.
En el 2003, apenas llegaron al poder, Lula y Kirchner protagonizaron algunos primeros chispazos incómodos, sobre todo por las dificultades del argentino para digerir la línea económica seguida por el brasileño. Sin embargo, a los pocos meses los prejuicios fueron dejados de lado y hoy el diálogo entre ambos países es más fluido que nunca, tal como demuestran una serie de iniciativas –la más importante de las cuales es el ingreso de Venezuela al Mercosur– que nunca hubieran podido concretarse sin el apoyo conjunto.
El amigo americano
Acostumbrado desde siempre a hacer y deshacer al sur del Río Bravo, Estados Unidos observa el hiperprotagonismo latinoamericano con una mezcla de aceptación resignada y resistencia sorda. Ya en 1983 se opuso al Grupo Contadora al negarse a reconocer al gobierno sandinista de Nicaragua. Más recientemente, su intervención osciló entre el apoyo moderado y el abierto obstruccionismo. En el golpe contra Chávez de 2002, mientras casi todos los países manifestaban su rechazo, el embajador norteamericano en Caracas, Charles Shapiro, se reunía con Pedro El Breve y decía: “Alabamos su intención de fortalecer las instituciones y los procesos democráticos”. En la crisis de Bolivia, Washington prácticamente no intervino: poco antes, su embajador en La Paz, Manuel Rocha, había avisado que su país rechazaba al “narcotraficante”, con relación a Evo Morales, lo cual sólo contribuyó a fortalecer la candidatura del líder indígena, así que después se limitó a mirar el caos desde lejos y, eso sí, otorgarle asilo al depuesto Sánchez de Lozada. ]En cambio, el respaldo estadounidense a la misión de paz en Haití fue inmediato, pero en este caso había un interés concreto: evitar una nueva oleada migratoria de haitianos empobrecidos a las costas de Florida.
En el caso de los rehenes colombianos, aunque evidentemente rechaza tanto el protagonismo de Chávez como el incómodo lugar en el que se ha puesto Alvaro Uribe, lo cierto es que Washington no ha tenido más remedio que mantenerse al margen. Riordan Roett, prestigioso internacionalista de la Universidad Johns Hopkins, sostiene que los problemas en Oriente Medio han generado un debilitamiento de la influencia de Estados Unidos en América latina y que hoy solo le quedan fuerzas para preocuparse por los que considera temas negativos: la transición en Cuba, el liderazgo de Chávez, la influencia de China y el poder de las FARC. Pero ni su alianza con Uribe, ni el hecho de que Colombia sea el tercer país del mundo que recibe más asistencia militar norteamericana después de Irak a Israel, han logrado que Washington juegue algún rol en la operación rescate, que descansa en las espaldas de Venezuela, Argentina y Brasil. En el patio trasero, la presencia latinoamericana crece en la misma proporción en la que el influjo estadounidense se atenúa, una novedad positiva pero que también entraña los riesgos de vivir con lo nuestro.
http://www.pagina12.com.ar/imprimir/diario/elpais/1-96848-20 07-12-30.html
Fidel Castro: sondeando temas sobre más democracia política en Cuba
BBCMundo.com
Castro habla de nuevo sobre el poder
El convaleciente líder cubano Fidel Castro reiteró que no está aferrado al poder, aunque antes lo estuvo, en un mensaje leído al inicio de la sesión de este viernes de la Asamblea Nacional cubana.
"No soy una persona aferrada al poder", manifestó Castro, y agregó: "Puedo añadir que lo fui un tiempo".
Según sus palabras, lo fue "por exceso de juventud y escasez de conciencia, cuando sin preceptor alguno iba saliendo de mi ignorancia política y me convertí en socialista utópico".
La misiva de Castro explica: "Era una etapa en que creía conocer lo que debía hacerse y deseaba poder hacerlo. ¿Qué me hizo cambiar?: la propia vida".
Segunda vez
Castro aludió por segunda ocasión a su permanencia en el poder. La primera vez que lo hizo fue el pasado 17 de noviembre en otro mensaje leído en un programa de la televisión nacional.
Entonces, Castro manifestó que su "deber elemental" no es aferrarse a cargos y "mucho menos obstruir el paso a personas más jóvenes, sino aportar experiencias e ideas".
No obstante, expresó que "hay que ser consecuente hasta el final", lo que dio lugar a interpretaciones contradictorias sobre lo que en realidad quería decir el líder cubano.
En la carta leída este viernes por el presidente del parlamento cubano, Ricardo Alarcón, Castro igualmente pidió "apoyo" para el presidente en funciones, su hermano Raúl.
Fidel Castro, de 81 años de edad, delegó provisionalmente sus cargos en julio de 2006, por razones de salud.
Está previsto que el 20 de enero de 2008 tengan lugar en Cuba elecciones parlamentarias para las que Fidel Castro fue nominado por un distrito de la ciudad de Santiago de Cuba.
Nota de BBCMundo.com:
http://news.bbc.co.uk/go/pr/fr/-/hi/spanish/latin_america/ne wsid_7163000/7163665.stm
Publicada: 2007/12/28 22:37:11 GMT
Cooperación Brasil y OIT contra el trabajo infantil en Haití
Memorándum impulsará colaboración Sur-Sur
Brasil y OIT lanzan iniciativa contra el trabajo infantil
México DF, 28 dic 07 (CIMAC).- El gobierno de Brasil y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) lanzaron este mes una nueva e importante iniciativa para fortalecer la lucha contra el trabajo infantil en el mundo, informa esta organización.
El Memorándum de Entendimiento, firmado por el ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Celso Amorim, y la directora de la Oficina de la OIT en Brasil, Laís Abramo, sienta las bases para la cooperación Sur-Sur que tiene como objetivo prevenir y combatir el trabajo infantil.
Junto con el Memorándum, el gobierno de Brasil anunció un programa para luchar contra el trabajo infantil en Haití bajo la coordinación del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC).
La iniciativa promoverá proyectos específicos de cooperación técnica Sur-Sur y actividades que contribuyan de manera eficaz a la eliminación del trabajo infantil, en especial en sus peores formas, en conformidad con las obligaciones internacionales de cada país.
Para la ceremonia de presentación está prevista la presencia de los ministros del Trabajo de Brasil y Guinea Bissau, así como de los encargados del tema de trabajo infantil de Haití, Angola y Mozambique, de la Comunidad de Países de Idioma Portugués (CPLP).
El objetivo de la iniciativa de OIT y Brasil es crear un foro para la cooperación Sur-Sur en la lucha contra el trabajo infantil, e incluye a grupos regionales como el Pacto Andino, Mercosur, CPLP, y el foro trilateral India-Brasil-Sudáfrica (IBSA).
Se promoverá la cooperación horizontal entre los países mediante el intercambio de experiencias positivas en la lucha contra el trabajo infantil. A lo largo de las últimas décadas, Brasil ha adquirido experiencia y consolidado buenas prácticas en la lucha contra el trabajo infantil que pueden ser compartidas con otros países.
Además esta iniciativa contempla estrecha colaboración con las organizaciones de empleadores y trabajadores para promover esta nueva forma de cooperación Sur-Sur.
07/GG
http://www.cimacnoticias.com/site/07122802-Brasil-y-OIT-lanz an.31575.0.html
Realidades de la inmigración sur-sur: Caso República Dominicana y Haití
http://www.nytimes.com/2007/12/27/world/americas/27migration .html
En este artículo se señalan diversos matices de la problemática.
December 27, 2007
Border Crossings
A Global Trek to Poor Nations, From Poorer Ones
By JASON DePARLE
The New York Times
Traducido al español en:
http://www.listindiario.com.do/app/article.aspx?id=44168
La República
REPORTAJE ESPECIAL
Emigrar a un país pobre desde uno más pobre: de Haití a RD
Jason Deparle - 1/14/2008
Dos veces por semana, cientos de haitianos cruzan la frontera para comprar en el mercado binacional.
El río Masacre, que divide a Haití y República Dominicana, es testigo silente de la migración de cientos de haitianos.
JUAN GÓMEZ, República Dominicana.- Las casuchas hechas con madera de desperdicio en una ladera lodosa son la versión de la tierra prometida para el hombre pobre. Tienen techos con goteras y suelos sucios, y carecen de luces y agua corriente. Pero cientos de inmigrantes haitianos han arriesgado su vida para venir aquí y trabajar en los campos cercanos, y son parte de una tendencia global: migrantes que se mudan a países pobres desde países aún más pobres.
Entre ellos se encuentra Anes Moisés, de 45 años, un hombre de piel oscura con matas de cabello gris, quien ha trabajado en los campos de República Dominicana durante más de una década, siempre ilegalmente. Los patrones de la granja le pagan cinco dólares al día y le dicen que los haitianos apestan. Los soldados lo han llamado “diablo” de piel oscura y lo han deportado cuatro veces.
No obstante, debido a que los ingresos promedio en República Dominicana son seis veces mayores que los de Haití, Moisés ha reaccionado a cada expulsión contratando a un contrabandista para que soborne a los guardias fronterizos y lo guían de vuelta.
“Nos vemos obligados a regresar aquí, no porque nos guste, sino porque somos pobres”, afirmó. “Cuando cruzamos la frontera, estamos un poco mejor. Podemos comprar zapatos y tal vez una gallina”.
Hacia “el sur del sur”
En el mundo en desarrollo, los migrantes se mudan a otros países cercanos con la misma frecuencia con que se mudan a países ricos. Sin embargo, sus números y sus penalidades no suelen ser tomados en cuenta.
Típicamente, son al principio más pobres que los emigrantes a países ricos, ganan menos dinero y es más probable que viajen ilegalmente, lo que hace aumentar las probabilidades de sufrir abusos. Se trasladan a países que, en comparación con las naciones ricas, les ofrecen a los inmigrantes menos protección legal y menos servicios.
No obstante, lo que perciben ayuda a sostener algunas de las personas más pobres del mundo.
Hay 74 millones de migrantes del “sur del sur”, según el Banco Mundial, que usa el término para describir a cualquiera que se muda de un país en desarrollo a otro, sin importar la situación geográfica. El banco estima que envían a casa de 18,000 a 55,000 millones de dólares cada año (el banco calcula también que 82 millones de migrantes se han trasladado del “sur al norte”, o de países pobres a otros más ricos).
Los nicaragüenses construyen edificios en Costa Rica. Los paraguayos recogen los cultivos argentinos. Los nepaleses excavan minas en India. Los indonesios limpian casas malasias. Peones de Burkina Faso cuidan los cultivos en Costa de Marfil.
Algunos ahorran para viajes más costosos al norte, mientras que otros encuentran que el traslado de una tierra pobre a otra es todo lo que podrán pagar. Mientras los países ricos cierran sus fronteras, es probable que la migración dentro del mundo en desarrollo.
“La migración del sur al sur no solamente es enorme, sino que llega a diferentes clases de personas”, afirmó Patricia Weiss Fagen, investigadora de la Universidad de Georgetown. “Estas son personas muy, muy pobres que envían dinero a personas aún más pobres y con frecuencia llegan a áreas rurales a donde no llega la mayoría de los envíos”.
El caso haitiano
La emigración de haitianos a República Dominicana, su vecino en la isla de la Hispaniola, ha sido grande, constante desde hace tiempo y llena de penalidades. Los hispanoparlantes dominicanos se refieren con irritación a una ocupación haitiana que terminó en 1844.
Los haitianos, que hablan criollo, señalan a 1937, cuando se estima que una masacre dominicana a lo largo de la frontera cobró la vida de decenas de miles de haitianos.Los trabajadores haitiaLos tranos comenzaron a llegar en grandes números hace casi un siglo, como ayuda temporal en los campos de caña de azúcar.
Pero muchos trabajan ahora durante todo el año en granjas o sitios de construcción urbanos, lo que hace aumentar su visibilidad y el potencial de conflictos. Las estimaciones varían enormemente, pero las autoridades dominicanas fijan la cifra de inmigrantes haitianos en un millón, o el 11 por ciento de la población.
En opinión de los haitianos, los problemas van más allá del trabajo duro y los bajos salarios, hasta la violación sistemática de sus derechos. Los dominicanos se benefician de su trabajo, afirman, pero les niegan documentos para trabajar, los deportan a su antojo y los discriminan en la creencia de que los haitianos tienen la piel más oscura. “No hay justicia aquí”, dijo Moisés.
Con frecuencia, los dominicanos se representan a sí mismos como vecinos generosos con recursos limitados, obligados a soportar la carga del mal estado, la indigencia y las enfermedades epidémicas en Haití. Aseguran que les ofrecen a los haitianos servicios y empleos -- 30 por ciento del presupuesto de salud pública es gastado en haitianos, según funcionarios gubernamentales -- mientras soportan sermones sobre derechos humanos por partes de países muy alejados de la pendencia.
El ingreso per cápita en República Dominicana es de 2,850 dólares; en Haití es de 480 dólares. El choque de civilizaciones puede ser visto a lo largo del Río Masacre, una vía fluvial lodosa de muy poca profundidad que las divide. En el lado dominicano, Dajabón es una ciudad comercial con 10,000 habitantes, con calles pavimentadas, servicios públicos y un nuevo café internet. Su contraparte haitiana, Ouanaminthe, es siete u ocho veces más grande, sin alumbrado municipal o agua corriente. Los caminos de tierra están llenos de basura y cerdos.
Dos veces a la semana, los dominicanos abren el puente, y miles de haitianos se apresuran a cruzar para comprar productos que son escasos en su lado: huevos, clavos, harina, concreto, zanahorias, salami, jugos, aceite para cocinar, gallinas vivas y sillas de plástico. El perímetro del mercado es patrullado por guardias armados, quienes tratan de asegurar el regreso de los haitianos.
El soborno y la violencia son comunes. En un caso actualmente ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, soldados dominicanos son acusados de disparar indiscriminadamente contra el camión de un contrabandista. Seis haitianos murieron.
Dos docenas de haitianos en un camión de contrabandistas se asfixiaron el año pasado. Sus cuerpos fueron arrojados al camino.
El pueblo de Juan Gómez se encuentra a 56 kilómetros al este de la frontera, después de tres puestos militares que registran en busca de inmigrantes ilegales.
Pero sus inmigrantes ilegales, como Moisés, viven a plena vista. Su presencia abierta apunta a las sospechosas reglas no escritas: los haitianos capturados en la frontera suelen ser enviados de regreso, mientras que se les suele permitir quedarse a aquellos necesarios para los patrones, al menos hasta que alguien lo objeta.
“No entrevistamos en el lugar de trabajo”, dijo Carlos Amarante Baret, director de inmigración dominicana. “Entendemos las necesidades del sector agrícola”. Admitió que la situación “beneficia al terrateniente” y que el extranjero, “debido a su posición de extranjero, es vulnerable”.
Entre un lado y el otro
Reunidos aquí, en una pequeña iglesia en lo alto de una colina, metida entre las casuchas, los trabajadores hablaron sobre las dificultades de las que huyeron y de las que encontraron.
Jacqueline Bayard afirmó que la amenaza de ser deportados deja a los trabajadores impotentes. Katline Auguste señaló que la falta de documentos legales le ha impedido visitar a sus niños en Haití desde hace tres años.
Lorvil Seus dijo que vive con el temor de la violencia vigilante, como en un conocido incidente en la cercana Haltillo Palma, en el que fue asesinado un pastor haitiano --y otros 2,000 haitianos fueron deportados-- tras la muerte de una mujer dominicana. Los asesinatos por represalia se propagaron, y tres haitianos fueron quemados vivos cerca de Santo Domingo, la capital.
Algunos emigrantes del sur al sur son “empujados” por guerras y crisis políticas. Otros son “jalados” por los empleos y los mejores salarios. Algunos migrantes siguen el trabajo de temporada. Algunos echan raíces. Algunos países --Argentina es uno-- se apresurado a amnistiar a los inmigrantes. Otros, incluyendo a Nigeria e Indonesia, los han sometido a deportaciones en masa.
Muchos países envían y reciben simultáneamente una gran migración. Una razón de que haya empleo para los haitianos es que muchos dominicanos se han marchado a Estados Unidos.
Eso revela lo que Dilip Ratha, un economista del Banco Mundial, llama un doble estándar común. “Muchos países desean u buen trato para sus propios ciudadanos en el extranjero, pero ellos mismos no tratan bien a los inmigrantes”, aseguró.
Una estrella de cine de la India llamado Hritik Roshan desencadenó un disturbio mortal en Katmandú, Nepal, en el año 2000, cuando se afirmó que dijo que “odiaba” a los nepalíes.
A veces, los costarricenses llaman despectivamente “nicas” a los nicaragüenses. En el 2005, dos Rottweilers mataron a un nicaragüense sospechoso de ser un ladrón, ante la mirada aprobatoria de una multitud. Se extendieron por el país los chistes que elogiaban a los perros.
No obstante, Manuel Orozco, de Diálogo Interamericano, un grupo de investigación en Washington, advirtió en contra de ver la migración del sur al sur solamente bajo una luz negativa. Calcula que los haitianos en República Dominicana envían a casa 135 millones de dólares anuales.
“Los países de destino se benefician de la mano de obra extranjera”, dijo Orozco, mientras que los inmigrantes consiguen trabajo. Afirmó que el desafío es crear políticas que “promuevan el desarrollo para los dos países, al tiempo que protejan a los migrantes y a sus familias”.
“Dejar simplemente que suceda la migración no es suficientemente bueno”, agregó.
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Pakistán: Extremo Oriente o Lejano Oriente, Asia

El Extremo Oriente es un bloque cultural que incluye Este de Asia, Sureste Asiático, el noreste de Asia y el Subcontinente Indio. Pakistan se concibe ocasionalmente como parte del Oriente medio, pero es parte del Sur de Asia. El límitecultural del extremo oriente es la India.
El término Extremo Oriente designa un área geográfica muy concreta ubicada al extremo Este del continente Euroasiático, y que se compone de una serie de países que tienen distintas culturas. Esta zona geográfica tiene unión y vinculación ya que está determinada en relación a las bases que desarrollaron las civilizaciones de la China y la India, civilizaciones que por su temprano y brillante desarrollo marcaron culturalmente a los países de ese entorno.
La lista de países considerados dentro del Extremo Oriente incluye, entre otros, los siguientes:
* Camboya
* China
* Corea del Norte
* Corea del Sur
* Filipinas
* Hong Kong
* India
* Indonesia
* Japón
* Laos
* Macao
* Malasia
* Mongolia
* Rusia
* Singapur
* Tailandia
* Taiwán
* Pakistán
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Medidas en Haití para mejorar la energía que proviene del petróleo: Chevon Corp transpotará el petróleo.
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Haití busca ayuda de Chevron para importar crudo venezolano
24 de Diciembre, 2007 - AP
Haití busca un contrato con la empresa Chevron Corp. para embarcar petróleo venezolano
Haití busca un contrato con la empresa Chevron Corp. para embarcar petróleo venezolano comprado conforme al programa de descuentos promovido por el presidente Hugo Chávez, dijo el domingo una fuente del gobierno.
Haití se sumó al programa Petrocaribe de Chávez hace más de un año, pero no ha podido transportar o recibir embarques hasta ahora, dijo Michael Lecorps, director de la oficina de asesoría a cargo de implementar el programa.
Un acuerdo con Chevron para llevar el crudo venezolano a Haití permitiría a la nación necesitada de energía importar 14.000 barriles diarios, dijo.
Conforme los lineamientos para financiamiento de Petrocaribe, Haití tendría tres meses para cubrir el 60% de cada embarque y 25 años para cubrir el resto con un interés de 1%, dijeron funcionarios.
El presidente de Haití, René Preval, fue el primero en anunciar las negociaciones con Chevron, que opera las gasolineras de la marca Texaco en la empobrecida nación caribeña, luego de regresar el sábado de una cumbre del Petrocaribe en Cuba.
``Vamos a firmar con Chevron y luego vamos a empezar a pedir petróleo'', dijo Preval, al señalar que técnicos venezolanos visitarán Haití para prestar asesoría en torno al proyecto.
Funcionarios de Chevron en la sede de la empresa en San Ramón, California, no respondieron al pedírseles comentarios.
Aunque Petrocaribe es principalmente un programa de financiamiento, Chávez animó a los jefes de estado presentes durante la cumbre de 16 naciones a aprovechar una cláusula que les permitiría pagar con servicios y productos locales. Cuba, por ejemplo, envía médicos a Venezuela a cambio de petróleo.
Los críticos afirman que Chavez creó el programa en el 2005 para construir una alianza contra Estados Unidos, pero los dirigentes caribeños como Preval indicaron que ayudaría a reducir los crecientes costos de la energía y los alimentos en sus atribulados países.
http://www.el-nacional.com/www/site/detalle_noticia.php?q=no do/8003