Por la libertad de conciencia. Escrito por: JUAN BOLÍVAR DÍAZ


12 Septiembre 2009, 10:22 PM



El chantaje religioso mucho daño ha hecho al cristianismo en siglos


Todo el que crea en la libertad de conciencia de los seres humanos está en el deber de rechazar el chantaje maniqueísta que a nombre de la fe religiosa se ha montado en el país para tratar de imponer en la Constitución de la República, y por lo tanto a todos los ciudadanos, el dogma de que la vida es inviolable desde que un óvulo es fecundado por un espermatozoide, sin ninguna consideración circunstancial.

Con el mayor desprecio por la conciencia de los demás se trata de imponer el criterio de que esa unión, que puede ser fruto del amor, pero también de la violencia criminal, y que es tan accidental que se practica miles de veces por día en los laboratorios de casi todo el mundo, tiene más derecho ciudadano que ese maravilloso ser humano que es la mujer o la madre.

Y lo que es peor, se ha manipulado tan ofensivamente la conciencia de los más ignorantes que el debate se ha presentado como si en el proyecto de nueva Constitución se estuviera intentando “saciar la sed de sangre de los abortistas”, mujeres y médicos “asesinos de niños”. Aunque no está en debate ninguna propuesta de constitucionalizar el aborto. Lo que muchos planean, en uso de su libertad de conciencia, es que se deje como materia del código penal, que es lo que ha ocurrido en toda la historia de la nación.

Si ese respetable predicamento religioso no ha figurado en ninguna de las treinta y siete constituciones que ha tenido el país, no hay razón para que se le dé rango constitucional cuando en gran parte del mundo las leyes han autorizado la interrupción del embarazo en circunstancias específicas, como cuando está en juego la vida de la madre, o si ha sido fruto de violencia criminal.

En el caso del embarazo ectópico ni siquiera se trata de escoger entre la vida del feto y la de la madre. Es que el producto de esa fertilización es científica y absolutamente inviable, que no tiene posibilidad de sobrevivir fuera del útero, ni de ser insertado en el mismo, que dejarlo desarrollar sólo sirve para explotar la trompa de Falopio de la mujer, producir una grave hemorragia y causar hasta la muerte, lo que ya sólo ocurre cuando la madre es pobre e indefensa.

No me cuento entre quienes creen que el aborto es sólo cuestión de decisión individual. Favorezco su regulación y lo creo improcedente en ciertos niveles del desarrollo del feto. Pero tengo que respetar a los que piensan lo contrario, y no me siento con derecho a estigmatizarlos ni condenarlos y mucho menos a nombre de mi profunda convicción cristiana. Como también respeto el derecho de los que predican hasta contra la prevención del embarazo por métodos artificiales legalizados en todo el mundo. Porque respeto a los demás y por auto respeto tengo que rechazar la apelación al chantaje y la amenaza a nombre de la religión, que tanto daño ha hecho al cristianismo a lo largo de sus siglos. No podemos ver con indiferencia que se pretenda dar rango constitucional a la concepción de pecado, como se hizo durante siglos con el divorcio.

Por razones profesionales seguí el debate que culminó en el 2004 en Chile, último bastión occidental de la prohibición del divorcio. Durante décadas algunas iglesias estigmatizaron y chantajearon a todo el que planteaba que el amor entre los seres humanos no se sostiene con preceptos constitucionales ni legales. Millones de chilenos se separaban y como no podían divorciarse establecían nuevas familias “ilegales”, con consecuencias emocionales y hasta de derechos para los hijos. Eso para la mayoría, porque todo el que disponía de diez mil dólares compraba una anulación del matrimonio bajo el alegato de que el acta contenía algún dato falso, por ejemplo la dirección de residencia de uno de los contrayentes. El presidente Ricardo Lagos, que promulgó el divorcio en Chile, no pagó ningún costo político, como se le amenazaba y ha quedado como un inmenso estadista.

Aboguemos todos porque en el debate constitucional prevalezca la racionalidad y porque los constituyentes voten de acuerdo a su conciencia, sin que nadie los amenace ni los estigmatice. En aras de la salud y los derechos de la mujer. Hay que rechazar el candado constitucional y luego mantener la demanda de que se autorice en el código penal la interrupción de cualquier embarazo que ponga en riesgo a la madre o que sea fruto de violencia criminal. Por respeto y amor a la vida. En libertad de conciencia.





DEMOCRACIA PARA MUJERES: Juan T H


No quiero llegar al poder sobre un montón de cadáveres de mujeres pobres que intentaron hacerse un aborto porque su vida estaba en peligro. La vida de un solo ser humano –incluyendo la de una mujer- vale más que la mayor fortuna del mundo.

No quiero llegar al poder pasándole por encima a los derechos fundamentales de las mujeres, que, por cierto, constituyen poco más de la mitad de la población del país y del mundo, y madres de todos los hombres, incluso de aquellos que las violan, las asesinan y las explotan de múltiples formas. Si, las explotan de muchas y variadas formas, tanto en los hogares como los centros de trabajo, en el partido, en el sindicato, y en los medios de comunicación. Explotación económica y marginalidad social. (La doble jornada laboral de la mujer, una con poca paga. La otra sin paga. Trabajo en la oficina o la fábrica, ocho y hasta diez horas. Luego el trabajo de la casa que es más agotador, pues tiene que lavar, planchar, limpiar, velar por los hijos, el marido, la suegra o cualquier otro pariente. Y encima de eso, cuando el hombre llega de parranda con sus amigos y amigas, murto de un jumo, tiene que estar dispuesta para el sexo)

Para muchos dirigentes políticos la democracia es una palabra. Y nada más. En sus hogares son verdaderos dictadores, monstruos, donde se hace lo que ellos dicen. ¡Y punto! Ay de la esposa, amante, novia o concubina que se atreva a contradecirlos. Ay de ella sin él descubre una infidelidad aunque sea con una mirada furtiva. El, que es infiel cada vez que lo desea, que llega a casa a la hora que quiera, no permite que ella haga lo mismo. ¡Ay de ella si reclama igualdad! ¡Ay de ella si reclama participación y respeto! Democracia en la calle, en el periódico, la emisora o en canal de televisión, pero no en el hogar. “¡En mi casa mando yo!” Eso nadie lo discute. Mucho menos ella.

El artículo 30 de la Constitución que se discute en el Congreso es la mayor prueba de la hipocresía, la mentira, la demagogia y la doble moral. Quienes apoyan esa aberración mayoritariamente son hombres, legisladores, dirigentes políticos y curas. A la mayoría debería darle vergüenza tratar en público el tema del aborto. Y más aun, oponerse tan rabiosamente, como si fueran santos.

Nadie, ni yo que apruebo el aborto siempre y cuando la mujer o la pareja lo decidan, está hablando de una ley liberal como existen en Europa y muchos estados de Estados Unidos. Estamos hablando de abortos terapéuticos, hablamos de interrumpir el embarazo en circunstancias muy particulares y especiales. Oponerse a eso, como se opone ahora Miguel Vargas, presidente del PRD, y el Cardenal López Rodríguez, es una barbaridad, bárbara, valga la redundancia y la repugnancia.

Hay concesiones que un partido serio, responsable, no puede hacer, aunque le cueste el poder. El poder por el poder no tiene sentido. El poder debe ser utilizado para producir transformaciones sociales que beneficien a las mayorías, no para enriquecer a un grupo de dirigentes políticos corruptos, como ha ocurrido en nuestro país.

Si Miguel Vargas y quienes lo acompañan en el “Nuevo PRD”, creen que colocándose del lado del Cardenal, en contra de las mujeres y su derecho a la vida, se acercan al gobierno, lamento decirles que no es cierto. El “Nuevo PRD” apoyando el artículo 30 de la Constitución se aleja del poder porque abandona a millones de mujeres que se aman más a si mismas que a Miguel Vargas y al “Nuevo PRD”. ¡Y en las urnas se verá!

Católicas por el derecho a decidir escriben al Congreso pidiendo el aborto terapéutico

Santo Domingo, D.N.
08 de Julio, 2009

Sres.:
Reinaldo Pared Pérez
Presidente de la Asamblea Nacional en
Funciones de Revisora de la Constitución

Dr. Julio Cesar Valentín
Vicepresidente de la Asamblea Nacional

A los miembros de la Asamblea Revisora


Distinguidos señores:

Somos mujeres y hombres pertenecientes a la Iglesia Católica, preocupadas y preocupados por las discusiones sobre la protección de la vida en el texto constitucional. En especial manifestamos nuestro dolor por el tono de las comunicaciones que las autoridades eclesiales han remitido sobre el contenido del artículo 30.a la Asamblea Revisora.

La discusión de bienes protegidos como la vida, la libertad, y la salud no debe llevarse de manera intolerante, mucho menos propiciar que la sociedad dominicana se polarice entre quienes desprecian la vida y quienes la defienden. Esto es una manipulación inaceptable: Quienes demandamos la revisión del artículo 30 defendemos apasionadamente la vida, y esta defensa de la vida constituye precisamente la esencia de nuestra demanda.

Toda vida merece la protección, el respeto y la garantía del Estado, funciones a las que éste no debe renunciar por presiones e imposiciones fundamentalistas religiosas o políticas. De aceptarlas, lesionaría la autonomía y los derechos sexuales y derechos reproductivos de las mujeres y con ello derechos de primer orden como la libertad, la salud y la vida.

Quienes representan al pueblo no deben adoptar decisiones por presiones de una determinada confesión religiosa e imponerlas al conjunto de ciudadanos y ciudadanas; esas normas de conductas son válidas para quienes comparten el credo religioso de que se trate.
Como creyentes y como personas involucradas en la temática que se discute, manifestamos nuestra disidencia con las opiniones emitidas por nuestra jerarquía católica sobre el contenido del artículo 30 del texto de la reforma constitucional en comunicados públicos y a través de sus portavoces.

En materia de sexualidad y reproducción, y a pesar de los señalamientos con pretensión de infalibilidad, hay un desacuerdo y desacato silencioso, pero mayoritario de católicas y católicos que no aceptamos el apedreamiento público, la exclusión, el señalamiento ni la penalización injusta eclesial ni civil hacia las mujeres.

Defender la libertad, la vida, la salud de las mujeres es una opción humana y ética, pues la maternidad es un acto fundamentalmente amoroso, de lo que se deriva que los hijos e hijas deben ser fruto de una decisión consciente, del deseo, del amor, y no del sacrificio de nuestras propias vidas. Actualmente, las fronteras del derecho a decidir coinciden con las fijadas entre lo público y lo privado, reconociendo que las decisiones sobre la vida privada dependen de la conciencia y los valores de cada persona, y no de los dictados de altos funcionarios de instituciones religiosas o del gobierno.

La coincidencia amorosa, el deseo sexual, la decisión de compartir la vida con otra persona, la paternidad y la maternidad no son decisiones públicas. Son expresiones individuales que conllevan derechos ciudadanos para su ejercicio y la Iglesia Católica debe aceptar que las personas tomen decisiones íntimas sobre su sexualidad y su reproducción.

Creemos que el texto referido de propuesta de reforma a la Constitución no apunta a la raíz del problema. Expresamos, en consecuencia, nuestra profunda convicción de que cualquier legislación propuesta por el Poder Legislativo relativa a la protección de la vida humana debe tener especial cuidado de velar por que se respete la conciencia individual y que sea reconocida y ejercida la responsabilidad cristiana de las personas de tomar decisiones informadas.

Las bautizadas y los bautizados que conformamos la Iglesia Católica tenemos diferentes maneras de pensar y eso no nos hace menos hijos e hijas de Dios, ni menos católicas y católicos que quienes piensan diferente. La interrupción de un embarazo en ocasiones especiales no es un dogma de fe ni una circunstancia de condena y creemos que se están manipulando los conceptos, cuya última palabra debe ser la de la ciencia y, en el caso de la feligresía católica, su propia conciencia.

Un Congreso se debe a la protección de todas las ciudadanas y ciudadanos y las mujeres dominicanas somos ciudadanas.
Pedimos que el texto del artículo 30 sea revisado considerando todo lo valioso de la vida de todas y de todos.

Porque el Señor es el Espíritu; y donde hay el Espíritu del Señor, allí hay libertad. 2Corintios 3:17

Con saludos atentos,

Josefina Gómez Mena, 001-0172056- 3
María Jesús Pola Z 031-0188051- 0
Manuela Vargas 031-0005502- 3
Kety Núñez 073-0001175- 1
Perla Massiel Hiciano 031-0536730- 8
Maritza Féliz 047-0029934- 2
Luis Antonio Acosta Tapia 031-0529483- 3
Miguel Angel Jiménez 031-0457743- 6
Carmelo Mateo Pérez 031-0447358- 6
Magnolia I. Pérez 031-0297095- 5
José Alberto Martínez 031-0005236- 8
Teresa Morel Mora 031-0256038- 4
Vanessa Martínez Vargas 031-0541109- 8
Elainy Suleika Pichardo M. 031-0541097- 5
Gloria Ramos 047-0171392- 9
Elizabeth Vélez Vargas 094-0021441- 8
Glenys Ramos Marte 047-0171399- 4
María Alejandra Veras P. 031-0312557- 5
Pedro Luis Veras N. O31-0188261- 5
Arline C. Fernández N. 031-0398142- 3
Desiree Del Rosário 103-0004649- 6
Fiordaliza Del Rosário Lamoni 103-0004646- 2
Yolanda Del Rosário de Reyes 103-0000748- 0
Nereyda Esther López Sosa 103-0005227- 0
Eladia Alta gracia Peña 031-0116352- 9
Carmen Luisa Liriano 031-0515299- 9
María Scharbay Martínez 001-1141697- 0
Wellington Martínez 002-0105384- 0
Julissa Rosario 054-0045777- 5
Joely Rodríguez 034-0046413- 1
Manuel Pérez 010-0012022- 8
Carlitos de León 011-0019692- 0
Rosa Florián Nova 022-0024334- 9
Marianela Pinales 001-042695-9
Aurelia Amarante 001-0232348- 2
Marcia F.Frias V. 001-1707576- 7
Ana Estévez E. 001-0065655- 2
Maljonys Peña 002-0009522- 2
Alma Josefina Nerio 001-0434236- 5
Jeannette Tineo Durán 031-0087925- 7
Rosa Hernández 001-1281618- 2
Luz Indira Saldaña 001-1513781- 2
Ignacia Damián Rojas 001-0116391- 3
María Estela Paulino 031-0206840- 4
Carmen Luisa Liriano 031-0515299- 9
Zobeida Cepeda 031-0118089- 5
Lidia de Padua 025-0004115- 3
Filadélfia Del Rosário Sosa
Mercedes Batista
Elvia Acosta De Leon : 001-1763261- 2
Yojanis Agesta. 103-0005062-1
Zobeyda Apolito 0 01-26269-0
Rosa Mercedes Inoa 1-1075142-7
Grey Ovalle Batista 001-1413328- 3
Genoveva Belén 1-0777986-0
Miosotis Rivas Peña 001-0149404- 5
Mu-Yien Sang de Suárez 001-0095883- 4
Joaquina Pacheco Villar 031-0092115- 8Albania Villar
Elsa López 001-0317986- 7
Rosa Reyes o .p 013-0019286- 9
Danilda A Estela Sosa 0310278560-1
Obama, con persistencia y pasión defiende el derecho de 47 millones de norteamericandos de tener una cobertura de seguridad en salud pública.

¡Viva la responsabilidad pública frente a todos y todas!

mildred d


____________

BBC Mundo

Última actualización: jueves, 10 de septiembre de 2009 - 02:29 GMT


Obama hace una llamada de urgencia

Carlos Chirinos

BBC Mundo, Washington

Con un mensaje ante el Congreso en el que mezcló dosis de optimismo, indignación, la memoria del recién fallecido senador Ted Kennedy y cierto tremendismo, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, buscó retomar la iniciativa política en el debate sobre la reforma de la salud.

En una inusual sesión conjunta del Congreso, el presidente Obama hizo una apasionada defensa, y la explicación más detallada hasta ahora, de lo que se ha convertido en su principal propuesta legislativa.

Obama apeló a la “historia de fracasos colectivos” cada vez que se ha intentado reformar el sector salud, a la solidaridad con los menos favorecidos por el actual sistema, a la calma a quienes están satisfechos con lo que tienen y hasta alguna amenaza a los republicanos si estos no quieren sentarse a discutir qué hacer con el sistema.

¿Salud pública o privada?

“Es hora de poner de lado las querellas. Ya no es momento de jugar. Llegó la hora de actuar. Es ahora cuando debemos aportar las mejores ideas de ambos partidos y mostrarle al pueblo estadounidense que todavía podemos hacer lo que nos encargaron que hiciéramos aquí”.

“No soy el primer presidente que asume esta causa, pero estoy empeñado a ser el último”, dijo Obama tras hacer una breve introducción, señalando la mejoría registrada por la economía desde que se presentó ante el Congreso a principios del año.

"No soy el primer presidente que asume esta causa, pero estoy empeñado en ser el último"

“Hace ya cerca de un siglo desde que Theodore Roosevelt hizo el primer llamado para reformar el sistema de salud. Y desde entonces, casi cada presidente y Congreso, sea demócrata o republicano ha intentado vencer ese desafío de alguna manera”.

Opción pública

El presidente usó historias de personas que han perdido sus seguros en los momentos en que les han sido más necesarios debido a “tecnicismos” y aunque disculpó a las aseguradoras diciendo que lo hacen porque “es un buen negocio”, afirmó que es una práctica inaceptable.

Por eso Obama dejó claro que mantendrá sobre la mesa la llamada “opción pública”, un sistema de seguros médicos manejado por el gobierno que daría cobertura a los trabajadores de pequeñas empresas, las personas de bajos recursos y hasta a los desempleados.

La posibilidad de que se cree esa opción pública ha llevado a muchos a pensar que el gobierno busca desplazar a las empresas privadas del negocio de la salud y que eventualmente podría controlar desde el costo de las medicinas hasta los doctores que atienden a los ciudadanos.

“No voy a ceder en el principio básico de que si los estadounidenses no pueden encontrar cobertura asequible, nosotros les proveeremos con una opción”.

Obama aclaró que la reforma no cambiará la cobertura que actualmente disfrutan los ciudadanos –salvo para mejorarla, según dijo – e insistió en presentar el argumento de los más de 47 millones de estadounidenses que se calcula no tienen cobertura médica.

Asuntos de dinero

Obama aseguró que el costo del plan que estimó en US$900.000 millones en diez años se financiará con los ahorros que se logren tras el perfeccionamiento del actual sistema de salud, una parte del discurso que fue abucheada por algunos republicanos.

“Es menos de lo que hemos gastado en las guerras de Irak y Afganistán, y menos que los recortes de impuestos para los pocos estadounidenses ricos que el Congreso aprobó al principio del gobierno pasado”.

Obama dijo viendo hacia la bancada republicana que “parte de las razones por las que me enfrenté con un déficit de un trillón de dólares cuando atravesé la puerta de la Casa Blanca es porque muchas iniciativas en la década pasada no tenían cómo pagarse”.

Los republicanos se han negado hasta ahora a sumarse a la iniciativa de reforma, pese a que en las últimas horas los demócratas han asegurado que podrían usar su mayoría para intentar pasar una eventual ley.

Gritos republicanos

“Continuaré buscando terreno común en las próximas semanas. Si acuden a mí con un conjunto de propuestas serias, estaré allí para escuchar”, dijo Obama, pero aclaró que los intentos para acercar a las partes tendrán un límite.

"Sepan esto: no voy a perder tiempo con aquellos que han hecho el cálculo que es una mejor política matar este plan que mejorarlo. No me quedaré viendo mientras los intereses especiales usan las mismas tácticas".

"Sepan esto: no voy a perder tiempo con aquellos que han hecho el cálculo que es una mejor política matar este plan que mejorarlo"

Como era de esperarse a lo largo del mensaje presidencial los republicanos permanecieron sentados casi todo el tiempo, mientras los demócratas aplaudieron con entusiasmo a Obama.

El inusual discurso también experimentó una inusual interrupción del congresista republicano por Carolina del Sur, Joe Wilson, quien gritó a Obama “usted miente” cuando éste aseguró que la reforma no beneficiará a los inmigrantes indocumentados.

Hasta hubo un momento de risas irónicas entre los republicanos cuando Obama dijo que faltaban “algunos detalles” por afinar en la propuesta de reforma.

Cambio de curso

Hacia el final de su mensaje Obama se refirió a una carta que recibió en mayo pasado del recién fallecido senador demócrata, Ted Kennedy, en lo que constituyó la porción más emotiva de su discurso.

Kennedy hizo de la reforma de salud una constante de sus casi 50 años en el Senado y hasta los últimos días de su vida estuvo promocionando la iniciativa del presidente Obama. Por eso muchos aseguraron que tras su muerte, los demócratas harían todos los esfuerzos para homenajear la memoria de quien era considerado su patriarca.

“En asuntos como estos, la pasión de Ted Kennedy no nació de una rígida ideología, sino de su propia experiencia. Era la experiencia de tener dos hijos golpeados por el cáncer”, dijo el presidente a una audiencia que incluía la viuda y los hijos del senador.

Muchos analistas destacan que ahora que el presidente Obama se ha puesto en el centro del debate tendrá que seguir alentando a sus seguidores y tratando de ganarse a los escépticos.

El resto de la semana habrá que analizar las mediciones de opinión para saber qué impacto tuvieron las palabras del presidente en el ánimo colectivo y si ha sido capaz de cambiar una situación que no venía luciendo favorable para la Casa Blanca en las últimas semanas.

http://www.bbc.co.uk/mundo/internacional/2009/09/090909_2259_obama_reforma_ao.shtml

© BBC 2009

Fray Cruzalta: amplía sus concepciones sobre los derechos sexuales y reproductivos y la jeraquía Católica

Fray Julián Cruzalta: “La iglesia no ha sido ejemplo de defensa de la vida a lo largo del tiempo”


Consciente del costo que al interior de su iglesia conlleva asumir posiciones -como la suya- cuestionadoras de fundamentalismos de todo tipo y defensoras de la vida humana “en el sentido amplio”, el sacerdote mexicano fray Julián Cruzalta visitó nuestro país mostrando viejas pero ocultas contradicciones en el mundo religioso sobre éste y otros temas vinculados. En entrevista exclusiva para APP compartió su mensaje de esperanza y respeto a los derechos sexuales y los derechos reproductivos de toda persona humana “incluyendo a sacerdotes y a monjas.”

En el debate sobre el momento en que surge la vida humana y en que ésta asume la condición de persona hay distintas concepciones eclesiales transitadas en distintos momentos históricos ¿cuáles son estas concepciones y cuál de ellas asume usted?

En el mundo religioso, no hay diferencia en cuanto a lo que es el valor de la vida humana. El problema surge en la diferencia en cuanto a cuándo esta vida humana se transforma en persona humana.

La última concepción eclesial sobre la vida humana, es del siglo 19, y es que tenemos persona humana desde el momento de la concepción. Pero ésa no siempre ha sido la postura oficial de la iglesia católica. La primera postura, hablaba de 40 días después de la concepción, en el caso del hombre, y el doble, en el caso de la mujer, concepción que nos da risa hoy día porque refleja la cultura patriarcal en la genética de entonces.

Llegamos a la Edad Media, y Santo Tomás de Aquino también defiende que no es en el momento de la concepción que hay vida.

Van a venir otras posturas al paso del tiempo: la morfológica, que es la de que hay vida humana cuando el feto tiene anatomía, o sea , que el feto no es el de un gatito, sino que tiene forma humana.
Otra es la cerebral, cuando la corteza cerebral está terminada, y hay dolor. Otras, entienden que es en el momento del nacimiento.
Un terreno resbaladizo

Por muchos siglos, se consideró que era en el proceso de individuación, cuando tengo un individuo, dos, tres individuos.
Estamos en un terreno resbaladizo, no hay doctrina que pueda establecerlo, y la misma iglesia católica así lo reconoce cuando en 1974, en su Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, del Vaticano, lo que sería hoy la Inquisición, la declaración de cuestiones sobre el aborto plantea “hagamos de cuenta que empezara desde la concepción”, con lo que admite que estamos en un terreno resbaladizo.

Luego, Juan Pablo II emitió un documento muy fuerte, la Encíclica Evangelio Vito, en que se admite que no se sabe cuándo se empieza a ser persona humana.

Es una mentira que durante 2000 años se haya dicho lo mismo respecto a la vida humana. Lo que está en el fondo de esta discusión es qué es la vida humana, no sólo la vida en general, si sólo es biología, si sólo es antropología, si sólo es sociología, si sólo es cuestión religiosa, y ahí van a venir las diferentes concepciones…Yo pienso que tiene que ser una visión multidisciplinar, ninguna ciencia, ninguna postura va a poder responder por sí sola qué somos las personas humanas, qué es la vida humana.

En una concepción biologicista de la vida humana, ésta es solamente el momento en que las células se organizan, se especializan, y ahí está el cerebro, el corazón, etc. Pero no todo conglomerado de células es vida humana.

En una concepción más amplia, hay cosas que no son sólo materia, como los sueños, las emociones, los enamoramientos, la paz, la libertad, los proyectos, que no se pesan, no están en ningún órgano. Los seres humanos somos una especie interpretativa, nos miramos y nos interpretamos, somos los únicos seres que hacemos eso. Somos los observados y los observadores a la vez. Tenemos esa capacidad de hacernos preguntas, y aquí la vida humana sale de esa concepción de solamente biología.

¿Por qué sostiene usted que el tema del aborto debe discutirse en el plano de la ética pública y no de la moral?

Porque la moral representa los grupos, lo individual, lo subjetivo, lo que cada uno piensa u opina, y no es que esto no valga, tiene mucho valor. Pero si lo vemos desde este punto de vista, tendría que haber una legislación para cada persona. En este plano nunca nos vamos a poner de acuerdo, porque cada grupo religioso y cada persona dentro de cada religión tiene su propia concepción.

A la iglesia no le corresponde aplicar su dogma a toda la población, sino a sus fieles, es al Estado. Pero no puede imponerse, en una sociedad plural, democrática, a toda la población.

Esta es una visión premoderna de la iglesia, o sea, previa a la democracia. Un valor de la democracia es la tolerancia, todos tenemos que opinar, otro es la diversidad, otro el respeto a todos y cada uno de los derechos. Esa es la postura de la iglesia, previo a esos derechos. Ahora, la iglesia tiene el derecho de insistir en su postura, pero el Estado no puede ceder ante esta postura, es el garante de la tolerancia, del respeto a la diversidad y de los derechos.

Pero dentro de las iglesias hay distintas posturas, como por ejemplo, Católicas por el Derecho a Decidir ha planteado el eslogan “Ni de la Iglesia, ni del Estado, mi cuerpo es mío”…

Yo soy de ese movimiento, que lo que hace es reivindicar modernidad dentro de todas las iglesias. La libertad de conciencia es un derecho. Un derecho humano básico. El garante de este derecho es el Estado. Lo preocupante es que el Estado no tenga una actitud de garante de este derecho, y que repita la posición de la iglesia. Un Estado democrático no puede repetir la estructura de la iglesia.

La postura oficial de la iglesia la expresan los señores obispos. Pero a su interior, cada quien opina a su nombre, yo opino a mi nombre. Soy sujeto, soy persona, soy creyente. Casi el 99 por ciento de los profesores de moral, dentro de la iglesia, no creemos en la idea de la vida desde la concepción.

Ciertas vidas no parecen importar a muchos que dicen preocuparse por la vida de quienes no han nacido. Por ejemplo, aquí un alto representante de la iglesia ha expresado su acuerdo con los asesinatos que hace la policía contra supuestos delincuentes en aras de “preservar la paz y la seguridad”. ¿Qué piensa usted de ese doble patrón con que se valora la vida humana?

La vida se tiene que defender toda, de manera integral. La vida es empleo, salarios dignos, educación. Se está parcializando mucho la defensa de la vida y esto es muy riesgoso. Ciertos grupos que se dicen defensores de la vida, la parcializan, sólo están defendiendo una etapa de la vida, y es la más cuestionable. Donde todo el mundo está seguro que hay vida humana, parece que no les interesa defender esa vida humana. ¿Y la vida de esas mujeres que mueren haciéndose abortos de manera clandestina? ¿Acaso no importa? Se dice que es muy mínima esa cantidad, se habla de porcentajes, pero aunque fuera una sola, hay que defenderla.

Aquí como iglesia tenemos que pedir perdón de un conjunto de cosas, como La Inquisición, las guerras santas… La iglesia no ha sido ejemplo de defensa de la vida a lo largo del tiempo. Entonces, aquí yo me pregunto la autoridad moral que tiene la iglesia para ser defensora de la vida. Es una pregunta que me hago, no me la respondo.

¿Qué relación ve entre la oposición desde la misma iglesia católica a la educación sexual en las escuelas y al uso de anticonceptivos y la gran cantidad de embarazos no deseados que en muchos casos terminan en aborto?

Para mí, el movimiento pro aborto es el que se opone a la educación sexual y a los anticoncepivos. Para mí la mejor lucha contra el aborto es la educación sexual desde la infancia y los anticonceptivos.

El problema de la iglesia es que ligó la sexualidad con la reproducción. Y la liga por un momento histórico determinado. Pero ya eso pasó. Hoy la especie humana no está en extinción.

¿Piensa usted que una mujer tiene derecho a interrumpir un embarazo si entiende que no tiene las condiciones para afrontar sus consecuencias?

No hablo de derecho al aborto, sino de derecho a vivir su vida conforme la siente y la piensa, responsablemente. Yo desde fuera no puedo imponer mi visión porque no conozco lo que ella está viviendo, sintiendo. Yo por esa mujer no puedo decidir. La conciencia es sagrada en el mundo religioso. Yo no puedo tomar el lugar de la conciencia de otros, aunque se equivoquen.

Como persona perteneciente a la iglesia católica, ¿qué otros derechos sexuales y derechos reproductivos usted defiende?

El derecho al placer, el derecho a la planificación, el derecho a la buena fama, no podemos calificar de homicidas a todas esas mujeres que se ven obligadas a abortar.

Todos estos derechos les corresponden a todo ser humano, a las monjas y los sacerdotes, incluidos. En México tenemos una campaña: Derechos sexuales y derechos reproductivos son derechos humanos. Pero aún no se miran así, se ven como un extra, de algunas mujeres, de algunos hombres, pero no, son derechos de todo ser humano. Como sacerdote, he decidido libremente no ejercer ciertos derechos. Aunque los tengo, es una decisión libre no ejercerlos, pues tengo el voto de castidad, pero reconozco que éste es un derecho humano que todos los seres humanos lo tienen.

¿Cuál es el costo, dentro de la iglesia –jerarquía y feligresía- de actitudes y prácticas como las suyas, defensoras de los derechos sexuales y los derechos reproductivos?

El costo es alto, pero pagable. Pienso que vale la pena. Es una postura no cómoda. A veces de confrontación, a veces incomprendida. Es una postura que te lleva a recibir agresión dentro de tu propia casa. Si soy católico, es porque quiero esta casa. Si en algún momento hago ciertos cuestionamientos, es para el bien de mi propia casa, no es una cuestión de mala fe. Si lo hiciera desde fuera, tendría más libertad para expresarme, pero se trata de mi familia y quiero una mejor familia.

La Sabiduría del Silencio Interno - Texto Taoista, traducido por Oscar Salazar

Para mí espiritualidd es la cualidad que tengo de abrazar todas las creencias animadas por el amor; por eso de cada religión abrazo la parte de la bondad, y de cada filosofía, o doctrina política, abrazo la parte de la bondad; y amo de cada persona, grupo, partido, corriente, movimiento: eso, la bondad. No me importa si sean personas agnósticas, ateas o religiosas.. De ahí que espiritualidad para mí significa unidad, amor, respeto, tolerancia, solidaridad, libre albeldrío,.... Respeto y unidad para todo lo que permita la dignidad humana, la sobrevivencia del planeta, y de toda naturaleza.

Milito para que sean superadas todas las creencias de sistemas políticos, económicos, sociales, culturales, filosóficos, y doctrinales, que quieran justificar la pobreza, o la marginación, o la exclusión, o la visión de seres superiores, inferiores, perseguidos, y que no disfruten de plenos derechos, solamente por eso de ser personas. Por eso soy feminista, para defender los derechos de una femeneidad y de una masculinidad libres, y donde hombres y mujeres sean iguales, y sean tratados con equidad, y sin arbitrariedades culturales que limiten su pleno desarrollo conforme a su interioridd, y sin consecuencias dañinas ni para la propia persona ni para las demás personas y el universo.

Acá coloco un contenido sobre la filosofía del Tao que trato de llevar a la práctica y enseñar.

mildd

_______

La Sabiduría del Silencio Interno - Texto Taoista


Habla simplemente cuando sea necesario. Piensa lo que vas a decir antes de abrir la boca. Sé breve y preciso ya que cada vez que dejas salir una palabra, dejas salir al mismo tiempo una parte de tu chi.

De esta manera aprenderás a desarrollar el arte de hablar sin perder energía.
Nunca hagas promesas que no puedas cumplir.

No te quejes y no utilices en tu vocabulario palabras que proyecten imágenes negativas porque se producirá alrededor de ti todo lo que has fabricado con tus palabras cargadas de chi.
Si no tienes nada bueno, verdadero y útil qué decir, es mejor quedarse callado y no decir nada.

Aprende a ser como un espejo: Escucha y refleja la energía.El universo mismo es el mejor ejemplo de un espejo que la naturaleza nos ha dado, porque el universo acepta sin condiciones nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestras palabras, nuestras acciones y nos envía el reflejo de nuestra propia energía bajo la forma de las diferentes circunstancias que se presentan en nuestra vida.

Si te identificas con el éxito, tendrás éxito.
Si te identificas con el fracaso, tendrás fracasos.
Así podemos observar que las circunstancias que vivimos son simplemente manifestaciones externas del contenido de nuestra habladuría interna.
Aprende a ser como el universo, escuchando y reflejando la energía sin emociones densas y sin prejuicios.
Porque siendo como un espejo sin emociones aprendemos a hablar de otra manera.

Con el poder mental tranquilo y en silencio, sin darle oportunidad de imponerse con sus opiniones personales y evitando que tenga reacciones emocionales excesivas, simplemente permite una comunicación sincera y fluida.

No te dés mucha importancia, y sé humilde, pues cuanto más te muestras superior, inteligente y prepotente, más te vuelves prisionero de tu propia imagen y vives en un mundo de tensión e ilusiones.

Sé discreto, preserva tu vida íntima, de esta manera te liberas de la opinión de los otros y llevarás una vida tranquila volviéndote invisible, misterioso, indefinible, insondable como el Tao.
No compitas con los demás, vuélvete como la tierra que nos nutre, que nos da lo que necesitamos.

Ayuda a los otros a percibir sus cualidades, a percibir sus virtudes, a brillar.
El espíritu competitivo hace que crezca el ego y crea conflictos inevitablemente.

Ten confianza en ti mismo, preserva tu paz interna evitando entrar en la provocación y en las trampas de los otros.

No te comprometas fácilmente. Si actúas de manera precipitada sin tomar conciencia profunda de la situación, te vas a crear complicaciones.
La gente no tiene confianza en aquellos que muy fácilmente dicen “sí”, porque saben que ese famoso “sí” no es sólido y le falta valor.

Toma un momento de silencio interno para considerar todo lo que se presenta y toma tu decisión después.
Así desarrollarás la confianza en ti mismo y la sabiduría.
Si realmente hay algo que no sabes, o no tienes la respuesta a la pregunta que te han hecho, acéptalo.
El hecho de no saber es muy incómodo para el ego porque le gusta saber todo, siempre tener razón y siempre dar su opinión muy personal.
En realidad el ego no sabe nada, simplemente hace creer que sabe.

Evita el hecho de juzgar y de criticar, el Tao es imparcial y sin juicios, no critica a la gente, tiene una compasión infinita y no conoce la dualidad.
Cada vez que juzgas a alguien lo único que haces es expresar tu opinión muy personal y es una pérdida de energía, es puro ruido.
Juzgar es una manera de esconder sus propias debilidades.
El sabio tolera todo y no dirá ni una palabra.....

Recuerda que todo lo que te molesta de los otros es una proyección de todo lo que todavía no has resulto de ti mismo.

Deja que cada quien resuelva sus propios problemas y concentra tu energía en tu propia vida. Ocúpate de ti mismo, no te defiendas.
Cuando tratas de defenderte en realidad estás dándole demasiada importancia a las palabras de los otros y le das más fuerza a su agresión.
Si aceptas el no defenderte estás mostrando que las opiniones de los demás no te afectan, que son simplemente opiniones y que no necesitas convencer a los otros para ser feliz.

Tu silencio interno te vuelve impasible. Haz regularmente un ayuno de la palabra para volver a educar al ego que tiene la mala costumbre de hablar todo el tiempo.
Practica el arte de no hablar. Toma un día a la semana para abstenerte de hablar. O por lo menos algunas horas en el día según lo permita tu organización personal. Este es un ejercicio excelente para conocer y aprender el universo del Tao ilimitado en lugar de tratar de explicar con las palabras qué es el Tao.

Progresivamente desarrollarás el arte de hablar sin hablar y tu verdadera naturaleza interna reemplazará tu personalidad artificial, dejando aparecer la luz de tu corazón y el poder de la sabiduría del silencio.
Gracias a esta fuerza atraerás hacia ti todo lo que necesitas para realizarte y liberarte completamente.
Pero hay que tener cuidado de que el ego no se inmiscuya. El poder permanece cuando el ego se queda tranquilo y en silencio.
Si tu ego se impone y abusa de este poder el mismo poder se convertirá en un veneno, y todo tu ser se envenenará rápidamente.

Quédate en silencio, cultiva tu propio poder interno.

Respeta la vida de los demás y de todo lo que existe en el mundo.
No trates de forzar, manipular y controlar a los otros.
Conviértete en tu propio maestro y deja a los demás ser lo que son, o lo que tienen la capacidad de ser.

Dicho en otras palabras, vive siguiendo la vida sagrada del Tao.

Texto taoísta traducido por Oscar Salazar

Situación política actual en Japón: el ascenso de los democrátas con Yukio Hatoyama, Partido Demócrata de Japón (PDJ)

Yukio Hatoyama es el nuevo Primer Ministro de Japón. Es el líder del Partido Demócrata de Japón (PDJ), de línea política de centro izquierda. Esta corriente política llega al poder luego de 60 años de hegemonía del Partido Liberal Democrático (PLD), de derecha. Esta victoria demócrata expresa un viraje hacia la izquierda de una potencia mundial en la que la derecha tenía sesenta (60) años en el poder; hoy día el país ve la necesidad de un cambio. Veamos el pensamiento de Yukio Hatoyama. Con la lectura de este artículo escrito por él nos facilita aguzar la mirada sobre temas candentes de políticas sociales y económicas. También hay un análisis de las correlaciones de fuerzas a nivel mundial, en términos de control, y de tendencias hacia un mundo más multilateral, con poderes regionales que equilibrrían más las necesidades de toda la humanidad y con menos caprichos de decadencia de todo por los excesos en políticas y anomias en una parte de la humanidad.

mildred d

Image Hosted by ImageShack.us


Yukio Hatomaya


ELPAIS.COM

TRIBUNA: YUKIO HATOYAMA

La llave de la fraternidad

Para el líder del Partido Demócrata de Japón, que ha ganado las elecciones en su país, los retos del futuro pasan por estrechar los lazos con sus vecinos del Sureste Asiático. Y por limitar los excesos de la globalización.


YUKIO HATOYAMA

02/09/2009

Durante los años posteriores al fin de la guerra fría, Japón ha sorteado los vientos del fundamentalismo del mercado que ha liderado Estados Unidos y que se conoce usualmente como globalización. Aunque en ésta defiende que la libertad es el más alto de todos los valores, el capitalismo fundamentalista ha tratado a la gente no como un fin sino como un medio. Con lo que se ha perdido la dignidad humana.

La reciente crisis financiera, sin embargo, nos ha obligado a enfrentarnos a la realidad. ¿Cómo podemos acabar con el fundamentalismo de mercado y con el capitalismo financiero, que carecen de consideraciones morales, para proteger las finanzas y la forma de vida de nuestros ciudadanos? Ése es el gran desafío del presente.

De lo que se trata es de regresar a la idea de la fraternidad -como en el lema francés de "libertad, igualdad, fraternidad"- como la fuerza moderadora que rebaja los peligros inherentes al uso de la libertad. Tal como yo la entiendo, esa fraternidad debe limitar los excesos de la globalización y recuperar las prácticas económicas locales que proceden de cultivar nuestras tradiciones.

En Japón hubo división de opiniones frente al fenómeno de la globalización. Hubo quienes defendieron sus logros y apoyaron dejarlo todo a los dictados del mercado. Otros entendieron que era necesario ampliar la red de seguridad social y proteger nuestras actividades económicas tradicionales. El Gobierno del primer ministro Junichiro Koizumi (2001-2006), del Partido Liberal Democrático, se inclinó por la primera opción, mientras nosotros, en el Partido Demócrata de Japón, hemos tendido hacia la última posición.

El orden económico y las actividades económicas locales de cualquier país se van configurando a lo largo de los años y reflejan la influencia de sus tradiciones, sus hábitos y el estilo de vida nacional. La globalización ha avanzado sin tener en cuenta los valores no económicos, ni las cuestiones ambientales, ni los problemas derivados del progresivo agotamiento de los recursos. Si analizamos los cambios en la sociedad japonesa que han ocurrido desde el final de la guerra fría, creo que no es exagerado decir que la economía global ha dañado las actividades económicas tradicionales y ha destruido a las comunidades locales.

El capital y los medios de producción pueden moverse ahora fácilmente de uno a otro lado de las fronteras internacionales. Sin embargo, la gente no puede hacerlo con tanta facilidad. En términos de cálculo económico, la gente simplemente es un gasto de personal, pero en el mundo real la gente apoya el tejido de la comunidad local y es la personificación física de su estilo de vida, sus tradiciones y su cultura.

Nuestra responsabilidad como políticos es volver a concentrar nuestra atención en los valores no económicos que han sido lanzados a un lado por la marcha de la globalización. Debemos desarrollar políticas que regeneren los lazos que unen a la gente, que tengan más respeto al medio ambiente, que reconstruyan los sistemas de beneficencia y las ayudas médicas, que faciliten una educación mejor y que apoyen la crianza de los hijos, y se enfrenten a la desigualdad en la riqueza.

Otra meta nacional que emerge del concepto de la fraternidad es la creación de una comunidad del este de Asia. El pacto de seguridad entre Japón y Estados Unidos continuará siendo, por supuesto, la piedra angular de la política diplomática japonesa. Al mismo tiempo, sin embargo, no debemos olvidar nuestra identidad como nación localizada en Asia. Creo que la región del este de Asia, que cada vez da más señales de la vitalidad de su crecimiento económico y de la fuerza de los lazos mutuos, debe reconocerse como la esfera básica del ser de Japón. Por ello, debemos continuar haciendo esfuerzos para establecer una cooperación económica estable y reforzar la seguridad nacional en toda la región.

La reciente crisis financiera ha sugerido a muchas personas que la era del unilateralismo americano podría estar llegando a su término, que nos estamos alejando de un mundo unipolar hacia una era de multipolaridad. No hay, sin embargo, en el presente, ningún país listo para reemplazar a Estados Unidos como el país más poderoso del mundo, como tampoco hay una divisa lista para reemplazar al dólar como divisa clave mundial.

Aunque la influencia de Estados Unidos está disminuyendo, seguirá siendo la principal potencia militar y económica durante las próximas dos o tres décadas. Los datos actuales muestran claramente que China, que tiene con mucho la población más grande del mundo, será uno de los principales poderes económicos del mundo, y ampliará también su poderío militar.

La economía china superará a la japonesa en un futuro no muy distante. ¿Cómo podría Japón mantener su independencia política y económica y proteger sus intereses nacionales al verse atrapado entre Estados Unidos, que lucha por retener su posición como potencia mundial dominante, y China, que busca formas para asentarse como una gran potencia?

Se trata de una cuestión de interés no sólo para Japón sino también para todas las naciones pequeñas y medianas de Asia. Todas quieren que el poder militar estadounidense funcione efectivamente para la estabilidad de la región pero quieren también evitar los excesos políticos y económicos estadounidenses. Y esperan reducir la amenaza militar que representa nuestro vecino China, asegurando que la onda expansiva de su economía se desarrolle de una manera ordenada.

A diferencia de Europa, los países de esta región difieren en el tamaño de sus poblaciones, fases de su desarrollo y sistemas políticos, y por ello la integración económica no puede alcanzarse al corto plazo. Sin embargo, debemos aspirar a avanzar hacia la integración cambiaria regional, como una extensión natural del rápido crecimiento económico comenzado por Japón, seguido por Corea del Sur, Taiwán y Hong Kong, y después alcanzado por las naciones reunidas en la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) y por China.

El establecimiento de una divisa asiática común probablemente tardará más de 10 años. Para que una divisa así produzca la integración política seguramente se necesitará todavía más tiempo.

La ASEAN, Japón, China (incluyendo a Hong Kong), Corea del Sur y Taiwán suman ahora la cuarta parte del producto interior bruto del mundo. El poder económico del este de Asia ha crecido y las relaciones de interdependencia de sus naciones se han hecho más profundas, lo que no tiene precedentes. Las estructuras necesarias para la formación de un bloque económico regional ya existen.

Por otro lado, debido a los conflictos históricos y culturales existentes entre los países de esta región todavía hay muchas cuestiones políticas por resolver. Los problemas de una creciente militarización y de disputas territoriales no pueden resolverse mediante negociaciones bilaterales entre, por ejemplo, Japón y Corea del Sur, Japón y China. Cuanto más se discutan sus problemas de manera exclusivamente bilateral, mayor riesgo existe de que las emociones de los ciudadanos de cada país se inflamen y el nacionalismo se intensifique.

Resulta paradójico pero las cuestiones que estorban en el camino hacia la integración regional sólo pueden resolverse en realidad mediante el proceso de avanzar hacia una mayor integración regional. La experiencia de la Comunidad Europea nos muestra cómo esa integración puede desactivar las disputas territoriales. Por eso creo que la integración en la región Asia Pacífico es el camino que debemos seguir hacia la realización de los principios del pacifismo y la cooperación multilateral que defiende la constitución japonesa. También es el camino apropiado para proteger la independencia económica y política de Japón y encontrar nuestra posición entre las grandes potencias del mundo, Estados Unidos y China.

Como escribió hace 85 años en Pan-Europa el Conde Coudenhove-Kalergi, el padre de la Unión Europea, "todas las grandes ideas históricas comenzaron siendo un sueño utópico y terminaron como realidades. El que una idea en particular siga siendo un sueño utópico o se convierta en realidad sólo depende del número de personas que crean en el ideal y actúen por él".


http://www.elpais.com/articulo/opinion/llave/fraternidad/elpepuopi/20090902elpepiopi_12/Tes