Iglesias y aborto: un tema plural. Caso niña Carmen en Brasil, marzo 2009

Se va avanzando en la lucha por la despenalización del aborto en tres causales en el Código Penal en discusión en República Dominicana

Va un reconocimiento a la observación del Código Penal enviado desde el Congreso (Senado) por parte del Presidente Danilo Medina

¡Viva la unidad de hombres y mujeres por la igualdad, la equidad, la justicia, en compartir bienes, poder, espacios, roles e identidades libres, viva la lucha por mujeres empoderadas!

Por Mildred Dolores Mata
Santiago, RD. 20.12.2016

Pueblito de organizaciones y amigas /os

Feministas de República Dominicana tenemos unos 15 años luchando por la despenalización del aborto por 3 eximentes:

1) Vida mujer en peligro si no se hace aborto. Ejemplo del caso Esperancita, Rosaura Almonte, por priorizar feto se pospuso quimio, tenía leucemia, expulsó feto, murió desangrada, contrariado sus deseos y los de su madre). http://acariciando.blogspot.com/2012/08/muere-esperanza-rosaura-almonte-j-por.html

Rosaura Almonte, Esperancita, fallecida por Código Penal impedir el aborto, 2014, RD

2) Otra eximente es, interrupción de embarazo fruto de violación y también por incesto, primeras 12 semanas.

3) Por feto genéticamente incompatibilidad con vida viable.

El 19.12.2016, el presidente Danilo Medina observó el proyecto Código Penal que penalizaba el aborto de manera absoluta.  Y volvemos al Código Penal del 1884. http://balanzalegal.com/leyes/2016/09/14/codigo-penal-de-la-republica-dominicana/  Y seguiríamos siendo  uno de los seis (6) países en todo el mundo, unos 200 países, que penalizan el aborto de manera absoluta.

Esto dejaría en desamparo a las mujeres pobres, que en esas circunstancias, ponen su vida en peligro con abortos inseguros y clandestinos.

Esta lucha podría seguir siendo larga por fundamentalismos de parte jerarquías en iglesias que presionan congresistas. A pesar de que el 77% de RD apoya aborto de la mujer en peligro con prioridad (Gallup Latinoamericana, 2015) y 32 % por violación. Pero parte del Congreso en los últimos años ha tenido un accionar poco democrático y de espaldas al pueblo. http://acento.com.do/2015/actualidad/8291238-encuesta-revela-77-dominicanos-apoya-aborto-si-la-madre-esta-en-peligro/

Francisco Álvarez defiende 3 causales despenalización, Presidente Profamilia y ex Coordinador de Participación Ciudadana

Los argumentos que sostienen las 3 casuales eximentes para despenalizar en el Código Penal  son analizadas opor Francisco Álvarez, presidente de Profamilia, y ex coordinador de Participación ciudadana http://acento.com.do/2016/opinion/8368013-abortemos-el-abuso/

El rector PUCMM, Ramón Alfredo de la Cruz Baldera ha dicho el debate se está dando desde el efundamentalismo (Diario Libre, 15 diciembre 2014). http://www.diariolibre.com/noticias/el-nuevo-rector-de-la-pucmm-critica-el-fundamentalismo-en-debate-aborto-DDDL926041

 En la Iglesia Católica el aborto no puede ser un dogma, pues eso el hecho nunca han estado todas y todos de acuerdo. Incluso en el Vaticano en su más alto nivel, el Rector de la Academia Pontificia para la Vida del Vaticano, Rino Fisichella, y el vocero del Papa, en ese entonces, Federico Lombardi, cuestionaron al arzobispo de Brasil, de la región de Olinda Recife, al obispo José Cardoso Sobrino, por excomulgar familiares y personal médico que hizo aborto a niña llamada Carmen, de 9 años, embarazada por violación de mellizos, y si no se hacía aborto moría. http://medicina.udd.cl/centro-bioetica/files/2010/08/aborto-de-ni%C3%B1a.pdf

Lo importante es que se está democratizando el debate, y se está conociendo la verdad de los hechos, no mentiras ni manipulaciones, contra la mujer, y con hechos que  generalizan y se muestran ofensivos contra la mujer.

¡Viva el conocimiento  científico, las distintas creencias ideológicas, por una sociedad que ame las mujeres, que le reconozca conciencia, ciudadanía plena y derecho a la vida, con prioridad y libertad, seguridad,  salud sexual y reproductiva, anticonceptivos, educación sexual para prevenir embarazos no deseados, proyectos de vida con oportunidades para la autonomía y el rompimiento con la cultura patriarcal o machista y la subordinación de la mujer tratada como objeto sexual e inferior!

¡Viva la unidad de hombres y mujeres por la igualdad, la equidad, la justicia, en compartir bienes, poder, espacios, roles e identidades libres, empoderadas!

Mildred D Mata
Santiago, República Dominicana, 20.12.2016

Anexo:

Análisis en documento que narra las contradicciones en parte de la jerarquía de Iglesia Católica de Brasil y el Vaticano por el aborto a la niña Carmen, por tener la vida en peligro.
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http://medicina.udd.cl/centro-bioetica/files/2010/08/aborto-de-ni%C3%B1a.pdf

Aborto en niña de 9 años con embarazo gemelar producido por violación

Representante vaticano: Reacción inadecuada ante la niña brasileña

Representante vaticano lamenta que la enseñanza de la Iglesia “haya aparecido como inmisericorde”

CIUDAD DEL VATICANO, lunes 16 de marzo de 2009.

El presidente de la Academia Pontificia para la Vida, el obispo Rino Fisichella, publicó este domingo un artículo en el periódico vaticano “L’Osservatore Romano”, en el que deplora lo sucedido en el caso de la niña brasileña, y juzga “precipitada” la declaración del arzobispo de Olinda y Recife sobre la excomunión de quienes han participado en el aborto.

El caso estalló a primeros de marzo, cuando a una menor brasileña de 9 años, 133 centímetros de estatura y 36 kilos de peso, violada repetidamente por su padrastro, le fue practicado el aborto de los mellizos que esperaba.

La polémica se endureció cuando monseñor José Cardoso Sobrino, arzobispo de Olinda y Recife, excomulgó a la madre y a todos los miembros del equipo médico, lo cual generó graves críticas contra la Iglesia en Brasil.

Monseñor Fisichella lamenta la precipitación en la condena en un caso moralmente tan delicado como éste, y afirma que “no era necesaria tanta urgencia y publicidad en declarar un hecho que se realiza de forma automática”, en referencia a la excomunión latae sententiae.

De lo que “se siente mayormente necesidad en este momento es el signo de un testimonio de cercanía con el que sufre, un acto de misericordia que, aun manteniendo firme el principio, es capaz de mirar más allá de la esfera jurídica”, explica monseñor Fisichella.

Es verdad que la niña “llevaba dentro de sí vidas inocentes como la suya, aunque fruto de la violencia, y han sido suprimidas; sin embargo, esto no basta para dar un juicio que pesa como una condena”, añade.

Abrazar antes que condenar 
Monseñor Fisichella lamenta la imagen dada por la Iglesia en este caso, pues “antes que pensar en la excomunión, era necesario y urgente salvaguardar la vida inocente de esta niña, y devolverla a un nivel de humanidad de los que nosotros, hombres de Iglesia, deberíamos ser expertos anunciadores y maestros”.

En este caso, esta niña “debía haber sido en primer lugar defendida, abrazada, acariciada con dulzura para hacerle sentir que estamos todos con ella”, admitió. La reacción “apresurada” del arzobispo de Recife, lamenta monseñor Fisichella, ha hecho que se resienta la credibilidad de la enseñanza de la Iglesia, “que parece a los ojos de muchos como insensible, incomprensible y privado de misericordia”.

Si bien insiste en que el caso de la condena del aborto como un mal intrínseco es uno de los principios morales “de los que la Iglesia no puede prescindir aunque quisiera”, recuerda también que el presente caso “era muy delicado”, y que “tratarlo de forma expeditiva no hace justicia” ni a la frágil persona de esta niña ni a cuantos se han visto envueltos en los hechos.

Otra cosa que lamenta el prelado es que casos como éste, por desgracia, “habría pasado inobservado, como tantos otros similares si no fuera por el fragor de las reacciones suscitadas por la intervención del obispo”.
“La violencia sobre una mujer, ya grave de por sí, asume una valoración más condenable cuando quien la sufre es una niña, con el agravante de la pobreza y la degradación social en que vive”. “No hay palabras adecuadas para condenar episodios como éste”, añade el prelado.

Dilema médico
 El presidente de la Academia Pontificia para la Vida afirma que este caso era muy delicado, y que dar juicios taxativos no hace justicia a la verdad, ya que para los médicos se planteaba un dilema moral muy grave.
Respecto a esta niña, “a causa de su jovencísima edad y de las precarias condiciones de salud, su vida estaba en serio peligro por el embarazo en curso. ¿Cómo actuar en estos casos? Decisión ardua para el médico y para la propia ley moral”.
 “Escenas como ésta, aunque con una casuística diferente, se repiten diariamente en las salas de reanimación, y la conciencia del médico se encuentra sola consigo misma en el momento de decidir qué es mejor hacer”.
Para cualquier médico, a no ser que se haya vuelto insensible, “una elección como esta de deber salvar una vida sabiendo que pone en serio peligro una segunda, no es vivida fácilmente”, añade.
“Nadie, en cualquier caso, llega a una decisión de este tipo con desenvoltura; es injusto y ofensivo sólo pensarlo”, afirma.

 El estupro, crimen gravísimo 
En el mismo sentido, el presidente de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil, monseñor Geraldo Lyrio Rocha, arzobispo de Mariana, lamentó públicamente la semana pasada que “el aspecto más repugnante de este caso haya quedado diluido ante la polémica por la excomunión”.
Sin embargo, como ya señaló la Conferencia en una nota del 6 de marzo, la cuestión verdaderamente grave es “el aumento de casos de abusos a menores en el país”, tema “sobre el que la conciencia nacional debe ser despertada”.
 Asimismo, el prelado recordó que la pena de la excomunión “no es sinónimo de condenación al infierno, sino que se trata de un acto disciplinar de la Iglesia”, que pretende “llamar la atención de las conciencias sobre un acto intrínsecamente grave, del que la gravedad a veces no existe una percepción clara”.
También recordó que monseñor Cardoso “no ha excomulgado a nadie”, ya que la excomunión es automática al realizarse el aborto, según la ley de la Iglesia.
 Además, aclaró, “para incurrir en excomunión, la persona precisa tener conciencia de la gravedad del acto y libertad para practicarlo”, lo que excluye en este caso a la menor y seguramente también a la madre, “que actuaron bajo presión”.