Movimiento Vida Sin Violencia –MOVIDA-
Declaración Día Internacional de la Mujer
Marzo 8 del 2014
Santiago, República Dominicana
“MOVIDA ABOGA POR CONDICIONES SOCIALES, ECONÓMICAS Y POLÍTICAS PARA EL EQUILIBRIO DE PODERES ENTRE MUJERES Y HOMBRES Y LA CIUDADANÍA ACTIVA DE LAS MUJERES”
El Movimiento Vida sin Violencia –MOVIDA- en este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, enfatiza que en la vida de la sociedad dominicana es vital el equilibrio entre hombres y mujeres para una sociedad armoniosa.
Para las mujeres es importante que se apliquen las normativas que establecen la igualdad de oportunidades, que haya efectivas políticas de equidad, para lograr la dignidad, consagrada en la Declaración de los Derechos Humanos desde 1948, así como también está establecida junto a la no discriminación, la libertad, en normativas diversas.
Se aspira a que las mujeres, al igual y junto a los hombres, sean libres y felices. Que se pueda seguir profundizando en el ejercicio de sus derechos para que la democracia sea más inclusiva y participativa, sea algo más que ir a votar como se decidió hace apenas 72 años.
Fruto de la discriminación que aún caracteriza la vida de las mujeres se necesita doblar esfuerzos para su protección y seguridad, para su respeto. Que no se sigan cosificando como objetos sexuales; que se garantice su sobrevivencia corporal, superándose la violencia por razones de género, la violencia psicológica, la sexual, la económica, la física, y que se reconozca la dureza que es el feminicidio, en todas sus variaciones, (íntimo y conexo) y se establezca así en la reforma del Código Penal en discusión en el Congreso Nacional.
A las mujeres se les viene restando autonomía, oportunidades para un proyecto de vida de trascendencia con oportunidades educativas, capacitaciones, trabajo remunerado, proyectos de economía solidaria, tiempo de calidad para su participación, por lo que es hora de compartir roles y espacios, el empoderamiento social y político.
En República Dominicana siguen pendiente de aplicación efectiva la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), firmada por RD en el 1982; la Plataforma de Beijing desde 1995 hasta la fecha; los Objetivos de Desarrollo del Milenio (2000-2015); la Convención de Belém do Pará, del 1994, que obliga a superar la violencia contra la Mujer; y así también compromisos de desarrollo inclusivo en la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030 (END Ley 1-12); en la Constitución Dominicana del 2010, en el artículo 39, que establece el equilibrio de poderes entre mujeres y hombres y de No violencia, en la Ley 24-97, así como también en la Ley municipal 176-07 que tiene como principios y tareas el empoderamiento de la mujer, compromisos con la igualdad, equidad y la no violencia de género, y esta aspiración de vida amigable está en el Plan Estratégico de Desarrollo de Santiago 2020.
, En la actualidad, las mujeres siguen con situaciones lamentables de mayor vulnerabilidad ante el fenómeno de la feminización de la pobreza. Esta situación, más las limitaciones educativas y de capacitaciones técnico-vocacionales y la ausencia de un proyecto de vida autónomo para las mujeres, la casi inexistente educación sexual, la desprotección y el asedio en que viven las adolescentes desde hombres mucho más viejos que ellas para usarlas y troncharles su desarrollo autónomo; el irrespeto y el control desde algunas familias en las que se les dificulta las relaciones afectivo-sexuales por las que las empujan a salir de casa, a hacer familias a destiempo, con un 23% de embarazos, generalmente no deseados, son consecuencias del machismo desbordado presente en la sociedad dominicana que desvaloriza aún más a la mujer.
¿Cómo se expresan estas diferencias en lo social-económico?
• En el año 2012 el desempleo femenino (21.5%) era más del doble del desempleo masculino (10.1%).
• En el 2009, por igual trabajo las mujeres percibían salarios promedio mensuales de 79% de los percibidos por los hombres.
• El 51% de las mujeres ocupadas está en empleos informales que las exponen a mayores condiciones de inseguridad.
• La fuerza laboral del trabajo doméstico remunerado (servicio doméstico) está constituida en un 91% por mujeres.
• Descansa en la mujer casi exclusivamente la tarea del cuidado de niños, niñas, lo que dificulta la inserción económica, social y política de las mujeres por lo que son importantes los servicios públicos como estancias infantiles, adultos mayores y de atención para personas con discapacidad.
La violencia de género
Como resultado de la dependencia económica como una causa principal de la violencia y de la discriminación, en la República Dominicana un 25% de las mujeres ha sufrido violencia en el transcurso de sus vidas, según ENDESA 2007.
Mortalidad materna
Los compromisos con la superación de la pobreza, un desarrollo sostenible inclusivo, la equidad de género y el empoderamiento de las mujeres, así como su salud materna fueron parte importantes en los 8 compromisos mundiales llamados Objetivos del Milenio (ODM). En septiembre del 2000, 189 líderes mundiales, y entre ellos, de RD, se reunieron en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y prometieron que sacarían a más de mil millones de personas de la extrema pobreza para 2015, superar significativamente la mortalidad materna.
El Objetivo del Milenio 5 se comprometió a “Mejorar la salud Materna”. “República Dominicana se encuentra entre los países con alta tasa de mortalidad materna, es decir, 159 o 127 por cada 100,000 nacimientos según ENDESA o UNICEF. Según las estadísticas las principales causas de muertes son la presión alta (frenesí), hemorragias, infecciones y abortos. Muchas de las causas citadas se pueden evitar. http://perspectivaciudadana.com/contenido.php?itemid=28343
Pobre ejercicio de los derechos sexuales y derechos reproductivos, más grave en la mujer joven
Los embarazos no deseados y los embarazos de las mujeres jóvenes, niñas, adolescentes…traen como consecuencia, la interrupción de los estudios, la dependencia económica de extraños, generalmente abusivos, de los cuales, una parte significativa tiene problemas de adicción al alcohol, drogas, o al sexo, o las adolescentes se van con parejas que sobrepasan su edad biológica, o que tienen ya otras parejas, y con muy poca afectividad y escaso respeto hacia ellas.
Esta degradación de la vida de niñas y adolescentes necesita de las familias dominicanas y de todas las instituciones de la sociedad una valoración de sus hijas, de sus mujeres, en su identidad psicológica-social, con una autoestima alta, cimentada en el ejercicio de roles más allá de su cuerpo y de comportamientos sexuales.
Una niña, una jovencita, no debe ser abandonada, descuidada, obligándola a responsabilidades de adulta, lejos de las escuelas, de la familia, de sus pares, y de una educación técnica, vocacional o universitaria, porque haya iniciado la vida sexual.
Empoderamiento
En el Objetivo del Milenio 3 se comprometió el mundo en “Promover la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer”. Continúa la cifra mundial, y al igual en RD que apenas un 16 % de las mujeres tienen poder político y, en determinadas áreas, menos.
Los datos detallados en República Dominicana en cuanto al ejercicio del poder político, hay que superar estos bajos niveles de poder que se reflejan en que apenas hay 3 ministras de un total de 22 ministerios, así como superar el débil ejercicio del poder en lo municipal con apenas un 8% de alcaldesas de un total de 155 municipios, y en el Congreso, apenas un 26 por ciento de diputaciones y unas 3 senadoras de un total de 32. Se destaca como algo más positivo en el ejercicio del poder público local el que un 33 % de mujeres estén en las regidurías.
Necesitamos estimular la participación de las mujeres en las estructuras dominicanas, sin importar su naturaleza. Las cabezas de las mujeres están casi ausentes en los organismos de decisión en la vida de los partidos políticos y en casi todas las esferas de la sociedad. Con las mujeres ausentes en las tomas de decisiones, la democracia es débil y no es representativa, pues casi la mitad de la población se encuentra pasiva, marginada y tratada como objetos sexuales. Esto no es desarrollo inclusivo, cohesionado, equilibrado, y es un mal ejemplo para la paz, la justicia, la igualdad, la equidad y el amor, en cada espacio de la sociedad donde hay desequilibrio de género entre mujeres y hombres. No se cumple la Constitución dominicana en su artículo 39 que establece el equilibrio de poder sin discriminaciones por razones de sexo, y en el artículo 42 se ordena erradicar la violencia contra la mujer.
Aún el Código Penal y en sus intentos de modificación se niega la vida y la salud de la mujer como prioritaria en caso de que un embarazo la ponga en peligro.
Necesitamos políticas públicas y voluntad política, social y económica para la participación plena de las mujeres. Con mujeres felices, alegres y con un ejercicio de participación total tendremos familias equilibradas en la toma de decisiones, en compartir roles y en construir lo público y lo privado con la integración de todas y todos.
La autonomía emocional, la ciudadanía participativa y la autosuficiencia económica en la mujer son importantes para relaciones de pareja equilibradas, para el pleno ejercicio del poder con equilibrio entre los sexos: y para ello alcanzarse, se necesitan políticas públicas de igualdad de oportunidades, acciones afirmativas de equidad, y empoderamiento en todos los ámbitos de la vida y en todos los roles. Que el peso de los roles domésticos y de cuidado sean compartido entre mujeres y hombres.
La discriminación, las desiguales oportunidades, la violencia, la pobreza, el menor ejercicio político con poder de las mujeres obstaculiza el desarrollo socio-económico del país y no es lo propio de una democracia. Es hora de que en todas las instituciones, y en todas las personas, sea un compromiso superar las desigualdades de género para una sociedad más justa, armoniosa, y cohesionada.
Organizaciones firmantes
Núcleo de Apoyo a la Mujer (NAM)
Casa Abierta
Coordinadora de Mujeres del Cibao (CMC)
Movimiento Feminista Hermanas Mirabal
Acción Callejera
Fundación Mujer iglesia
Colegio Dominicano de Periodistas
Organización para el Desarrollo de la Mujer Dominicana (ODEMUD)
Fundación Vanessa
Centro Integral para el desarrollo Local (CIDEL)
PROFAMILIA