En propuesta de Código Penal en el Congreso de la República Dominicana se condena a las mujeres a las que hay que interrumpirles un embarazo a morir. Por doctora ginecóloga y obstetra Lilliam Fondeur

En República Dominicana, la Cámara de Diputadas y Diputados acaba de leer en primera lectura una propuesta de Código Penal que penaliza la interrupción del embarazo en todas las circunstancias, no importa si la vida de la mujer está en peligro, si el feto está mal formado, si la mujer ha sido víctma de una violación o incesto y ha salido embarazada.
La madre de la niña Rosaura, Esperancita, llora la muerte de su hija, a la cual no se le quiso interrumpir un embarazo que ponía en peligro su vida por ella padecer leucemia, cáncer en la sangre, debido a que las leyes dominicanas penalizan el aborto en todas las circunstancias.
Lilliam Fondeur es médico ginecóloga y nos comenta las daños de esta insistencia en ignorar los acuerdos internacionales, la obligación desde la Constitución a preservar la vida de las mujeres, y se condena a la clase médica y a todas las personas que apoyen a la mujer en este duro momento. Vemos lo que nos escribe la doctora Lilliam Fondeur:
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Nuevo Código Penal aumentaría pena por aborto

Por Lilliam Fondeur     

Las autoridades imponen la desigualdad.  En la Comisión de Justicia de nuestra Cámara de Diputado descanza una propuesta de Código Penal que aumentaría la pena entre veinte y treinta  años de prisión mayor al médico que cause o ayude a  una mujer a abortar y como consecuencia la mujer muera.
La doctora Lilliam Fondeur, ginecóloga y obstetra, junto a otras integrantes del Foro Feminista (FF)
 El  Código Penal vigente que sanciona a los médicos, enfermeras y farmacéuticos que causen o ayuden a causar un aborto con  penas entre cuatro  y diez años de prisión no ha logrado reducir las cifras de abortos, ni de muertes por abortos inseguros, por el contrario, continúan en aumento.
La niña Rosaura o Esperancita, yace en el ataud, muerta fruto de sangrado al expulsar un feto incopatible con su enfermedad de leucemia, el Congreso de la República Domicana, en la Cámara de Diputadas y Diputados, acaba de aprobar en primera lectura que no se pueda interrumpir un embarazo en ninguna circunstancias.


 La penalización no reduce los abortos, aumenta la inseguridad y con ella las complicaciones y muertes por interrumpir el embarazo a espalda del Sistema de Salud.

Con el Código Penal actual los médicos están atados, no se atreven a interrumpir un embarazo aun cuando este ponga en riesgo la vida de la mujer.  Se ven obligados a dejarle a la naturaleza o al destino la salud de la mujer, en contraposición con las pautas del ejercicio médico.

El manejo de la enfermedad de  Esperancita, la menor de edad embarazada con leucemia que se le pospuso la quimioterapia, se le negó el aborto y falleció, evidencia lo que significa ser mujer pobre y llegar a un hospital del Estado.

Esperancita murió desangrada, las autoridades afirman que sangraba por la vagina.  La quimioterapia le produjo un aborto espontaneo.  Si el aborto se hubiese programado quizás no muere por un sangrado vaginal.

Si Esperancita hubiese llegado a una clínica del polígono central seguro se le hubiese interrumpido el embarazo y se le hubiese dado la quimioterapia adecuada y oportuna con el único objetivo de intentar salvar su vida.  Esperancita murió por ser pobre, la mato nuestra legislación.

Las inaceptables cifras de mortalidad materna es la  enagua que se le sale al Sistema de Salud.  Los abortos inseguros son una de las causas de mortalidad materna.  Aumentar la pena es aumentar la inseguridad.

¿Cuándo nuestro Congreso dejara de legislar a espaldas de la población, a espaldas de las mujeres?

Todas las mujeres, tienen derecho a disponer de su cuerpo, del instrumento con el que tocan la vida; incluso las más pobres y de hecho lo intentan aunque pongan en riesgo su vida o mueran.

 Las políticas que intentan controlar el cuerpo de las mujeres son tan misóginas como el hombre que roció ácido muriático en la vagina de una joven.

En el discurso las autoridades se proponen reducir la mortalidad materna. Ojalá creerles.  Por sus hechos los conoceréis.


http://www.elnacional.com.do/opiniones/2012/10/11/137800/Ginecologia-actualizada